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Los gatos de sa Teulera se quedaron huérfanos, sin ‘Jony’, pero un grupo de voluntarios se va a hacer cargo de ellos. Varias personas se reunirán este viernes 22 de octubre, entre las 18.00 y las 20.00 horas, para recordar al hombre y recoger comida para la colonia de felinos en los bancos de piedra situados junto al Mercadona, donde vivía el indigente que, en realidad, se llamaba Esteban Rey Simón. Tenía 70 años.

Mucha gente intentó ayudarle a encontrar un hogar para que dejara la calle, el bosque de sa Teulera, pero ‘Jony’ se negó a abandonar a su familia de gatos. Unos amigos del hombre, Magda, Gemma, Javi y Carmen, se encargarán a partir de ahora de cuidar de la colonia de felinos, que dependían de ‘Jony’, una persona muy querida por el vecindario que falleció el pasado viernes por la noche en el hospital a consecuencia de un cáncer de pulmón. Amigos y conocidos han improvisado un altar en los bancos en los que siempre estaba él cuidando de cerca de una veintena de felinos.

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Hay flores, dibujos y cartas anónimas de despedida con fotografías de ‘Jony’. En una de ellas se lee: «Nunca pediste nada para ti, sólo para los gatitos. Un hombre bueno y bondadoso. Gracias por dedicar tus días a querer a los felinos y por esos momentos de charlas que teníamos. Ojalá más gente buena como tú, el mundo sería un lugar mejor. Los gatitos y los que te apreciábamos no nos olvidaremos de ti nunca. Como tú me decías a mí, ¡gracias amigo!».

En una fotografía aparece ‘Jony’ en su banco, vestido con un polo rojo, acariciando con un cigarrillo entre sus dedos a uno de sus gatos. Una nota manuscrita acompaña a la imagen y explica que el hombre se «refugió en unos animalitos que te dieron todo el cariño. Donde estés, gracias por enseñarme a valorar a las personas por encima de lo material».

Una mujer que conocía a ‘Jony’ recuerda que el gato favorito del hombre sigue esperándole en solitario en los bancos de piedra junto al bosque de sa Teulera. «Los gatitos lo van sobrellevando, pero el blanco y negro… te parte el corazón porque le sigue esperando… hasta que se cansa y se va con los demás».