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El juzgado vacía el hotel COVID de estudiantes. La juez Sonia Martín ratificó solo de forma parcial el confinamiento forzoso. Solo se quedan en el interior del Palma Bellver los 74 jóvenes que son positivos por coronavirus. Todos los que tenían que cumplir cuarentena por ser contactos estrechos, 175 salieron después de que el auto del Juzgado de lo Contencioso 3 de Palma considera que su encierro no era proporcional. Cinco de los que aún no habían dado positivo lo hicieron este miércoles y el Govern impuso su retención.

La resolución llegó este miércoles tras cuatro días de confinamiento y en ella se ataca la «ausencia de claridad por parte de la administración» a la hora de explicar el porqué de la medida y de quién es contacto estrecho. La juez considera que la Conselleria ha sido poco precisa a la hora de justificar la medida y que «solo se hace referencia de una manera genérica a brotes pero no se acredita que hayan participado en esas actividades los jóvenes cuyo confinamiento se pretende ratificar».

También quedan fuera del confinamiento un grupo de cinco jóvenes que se negaron a someterse a un test porque tampoco se ha acreditado que sean contacto estrecho de los que sí han resultado contagiados. Inicialmente fueron 52 quienes rechazaban la prueba.

«Potencial diagnóstico»

El auto niega que se pueda confinar en base a un «potencial diagnóstico» y exige pruebas ciertas de contagio o una muy alta probabilidad de que el afectado «haya sido un contacto directo, continuado y sin las correspondientes protecciones», de tal manera que el peligro de que, tras unos días, pueda dar positivo en uno de los controles sea muy evidente. Añade: «No es ajena esta juzgadora a que estamos en una situación de crisis sanitaria mundial y de la dificultad a la que se enfrenta la administración sanitaria, pero en un Estado de Derecho, la salvaguarda de los derechos fundamentales debe ser el estandarte que a todos nos debe guiar y las restricciones a los mismos, proporcionadas, necesarias e idóneas».

Numerosos medios de comunicación se han agolpado a la entrada del hotel medicalizado tras conocerse la resolución judicial.

Ataca, en este sentido, la falta de documentación aportada por la Conselleria de Salut y que se haya tenido un criterio «genérico» a la hora de establecer quién es un contacto estrecho. Sobre las recomendaciones del Centro de Enfermedades Infecciosas, señala que se pueden tener en cuenta para cribados u otras medidas, pero no para un confinamiento forzoso. El organismo nacional recomendaba considerar un contacto estrecho a todos los estudiantes en viaje de fin de curso tras detectarse el megabrote de Mallorca en otras comunidades autónomas.

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La resolución sigue el criterio fijado por la Fiscalía de Balears que ya se opuso a mantener las medidas por la falta de motivación de las mismas por parte del Govern. El auto pone como ejemplo otras actuaciones de la misma Conselleria como los confinamientos forzosos de inmigrantes que llegan en patera y que siempre se han ratificado porque se identificaba tanto a los positivos como a los contactos directos con los mismos.

Trabajadores

También establece una comparación con los trabajadores de los hoteles en los que se alojaron los jóvenes y que también podrían ser considerados contactos estrechos. Fueron sometidos a pruebas PCR y de ellos sólo uno dio positivo sin que se decretara ningún confinamiento en masa.

El Govern planteó al juzgado al ratificación de la medida el pasado sábado de madrugada, después de que, en primer lugar, se intentaran dar una serie de órdenes verbales que provocaron problemas con las fuerzas y cuerpos de seguridad. El juzgado realizó una petición de información adicional al considerar que faltaba documentación en la petición inicial del Govern. Aunque la medida entró en vigor de forma inmediata, la administración puede recurrirla ante el Tribunal Superior de Justicia. Sobre los confinados que sí han dado positivo, el auto exige a la Administración que, cada cinco días le informe de su evolución.

Crítica al Govern

El auto ataca la «ausencia de claridad por parte de la administración» a la hora de explicar el porqué de la medida y de quién es contacto estrecho.

El auto niega que se pueda confinar en base a un «potencial diagnóstico» y exige pruebas ciertas de contagio o una muy alta probabilidad de que el afectado «haya sido un contacto directo, continuado y sin las correspondientes protecciones».