El Social Club Mallorca vivirá la avanzadilla de la vuelta a las pistas de baile tras la pandemia. | Jaume Morey

TW
13

Mallorca se prepara para la vuelta tan reclamada del ocio nocturno y lo hace con una prueba piloto que este sábado recalará en las instalaciones del Social Club Mallorca, en el Passeig Marítim de Palma. El despegue del sector será evaluado a partir de este test, en el que participarán hasta 300 personas que tendrán que cumplir con una serie de requisitos sanitarios de acceso.

Quienes deseen acudir, además de comprar la entrada al organizador, deberán acreditar que han sido vacunados con una dosis contra la COVID-19 al menos hace quince días, contar ya con la pauta completa de vacunación o dar negativo en una prueba de antígenos. Precisamente, Salut Pública se encuentra en estos momentos preparando los circuitos para todos aquellos que deban realizarse el test rápido. También se puede presentar un PCR realizada 72 horas antes del evento.

El ocio nocturno lleva más de un año cerrado por la pandemia de la COVID-19 en Baleares. El Govern, dentro de su plan de desescalada lenta, optó por realizar varias pruebas piloto en Mallorca y en Ibiza que permitan determinar cómo será la vuelta a las discotecas, y también a los festivales de música, ya que se harán pruebas también en el Mallorca Live Festival y en el Hard Rock Hotel Ibiza, ambos el 25 de junio. Con el resultado de estos eventos se pautará a partir de julio la reapertura.

Noticias relacionadas

Aforo

La vuelta a las pistas de baile se presenta con esta avanzadilla de aforo limitado y controlado, en la que podrán participar todos aquellos que logren hacerse con una de las entradas que ya han salido a la venta y que pueden reservarse a través del correo electrónico oficial del Social Club.

Una vez superado el requisito de acceso, los asistentes deberán de cumplir con toda una serie de medidas adaptadas a los dos espacios disponibles. En la discoteca, interior, se tendrá que hacer uso obligatorio de mascarilla FFP2, mientras que en la terraza los participantes podrán librarse de la protección facial y beber sentados en las mesas habilitadas.

Además, los asistentes tendrán que ser mayores de 25 años, no podrán fumar en todo el recinto y deberán llevar una mascarilla FFP2 que sólo podrán retirarse estando sentados en la terraza para consumir bebidas.