Un momento de la visita de María Jesús Montero al Centre de Simulació de Son Espases, celebrada este miércoles. | CAIB

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El Gobierno pagará finalmente a Baleares los 78 millones de euros del IVA no pagados en el año 2017, si bien lo hará «en su momento» y tras estudiar la sentencia que le obliga pagar esta deuda a la comunidad de Castilla y León. Lo anunció la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en su primera visita oficial a las Islas un día después de que el Parlament reclamara el pago de este dinero con el aviso de acudir a los tribunales si no lo hace.

La visita de Montero, la primera en los tres años que lleva en el Ministerio, era muy esperada porque muchos son los asuntos que competen a Balears y que dependen de su Ministerio. Vino a firmar las ayudas de 855 millones para que las empresas de las Islas se recuperen de la crisis y aprovechó para lanzar un mensaje de colaboración con el Govern de Francina Armengol, a pesar de las discrepancias entre ambas administraciones: «Nada más lejos de la realidad eso de estar a la gresca entre administraciones; queremos remar en la misma dirección».

Entre las cuestiones pendientes entre ambas administraciones, la sustancial es el desarrollo del REB y la aprobación de la parte fiscal del régimen que debe compensar la insularidad. Sobre el primer asunto, la ministra informó de que en breve se reunirá la comisión que debe aplicar el factor de insularidad, un corrector para que las Islas no queden por debajo de la media inversora en los Presupuestos Generales.

Es lo que ha pasado en los Presupuestos de 2021 si solo se examinan las inversiones directas, si bien la ministra precisó que a este dinero debe añadirse todas las transferencias de capital que realiza el Gobierno y que, según dijo, colocan a las islas por encima de la media.

La ministra también se mostró dispuesta a abordar la aprobación de la parte fiscal del REB, retrasada por la gestión de la pandemia y partidaria de abrir un debate «sosegado» sobre el nuevo modelo de financiación. En cualquier recalcó la voluntad firme del Govern de ayudar a las comunidades, como lo demuestran los 13.500 millones de financiación extra que han recibido las autonomías para combatir la pandemia.

«Nunca Balears había recibido tanto dinero ni se había entendido tanto la situación especialmente difícil que viven las Islas», aseguró Francina Armengol en agradecimiento al pago de los 855 millones.