Diputados y diputadas de Més (en la imagen Josep Ferrà y Patricia Font) llevaron su protestas al pleno. También Podemos exhibió carteles. Més ha propuesto reuniones con la plataforma antifascista. | Teresa Ayuga

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La presidenta del Govern, Francina Armengol, aseguró este martes que «nunca renunciaré a la palabra ni a hablar en sede democrática». Fue al responder a una pregunta del portavoz de Vox, Jorge Campos, que le preguntó si secundaba la propuesta de ‘cordón sanitario’ impulsada por Més. Además, la acusó de «liderar una campaña de odio» contra su formación.

«No me rebajaré a su nivel y les ganaremos con políticas, con hechos y ejecución de propuestas», dijo Armengol.

La pregunta que llevó al pleno no tenía que ver con la propuesta de Més –que ayer reiteró– pero Campos aprovechó su momento de intervención. «Frente a su extremismo antidemocrático, nosotros seguiremos defendiendo, la democracia, la convivencia y la libertad», le había dicho.

«Escucharlo hablar de democracia, de chulería, de extremismos es realmente sorprendente. Se debería mirar en el espejo y escuchar lo que dice», fue secundada con un rotundo aplauso y gestos de aprobación no sólo de los partidos del Govern.

Carta a los partidos

El grupo parlamentario de Més remitió ayer al resto de grupos una carta con las propuestas que había esbozado el día anterior el diputado Josep Ferrà. La firma Miquel Ensenyat, portavoz, y les invita a «coordinar una acción conjunta que posibilite aislar a aquellos que quieren convertir la casa de todos en un altavoz de odio y crispación».

«Hay que parar al fascismo y la ultraderecha» fue el mensaje que reiteró Ferrà. Según dijo, no se trata de callar ante «los mensajes de odio de Vox» pero sí de evitar ser su «altavoz». Indicó que es tarea de todos los sectores, del ámbito político y de la comunicación.

«Las fuerzas democráticas tenemos que pasar de las palabras a los hechos y actuar de manera efectiva para combatir a la extrema derecha. No podemos tolerar que determinados postulados que no respetan los derechos humanos tengan amparo en el Parlament», expresa Ensenyat en la carta a los grupos.

Més y Podemos visibilizaron en el pleno su oposición «al fascismo». Lo hicieron con pegatinas que colocaron junto a sus ordenadores en los escaños o con alguna camiseta, como hizo la diputada de Més per Menorca Patricia Font.

La socialista Silvia Cano indicó que en la Cámara balear funciona ya de hecho un ‘cordón sanitario’ contra Vox aunque no se haya señalado de forma expresa. De este asunto se habló en la reunión semanal de los partidos.

El pleno incluía una moción de Vox

El pleno incluía una moción de Vox, en la que reclamaba una comisión investigadora sobre el transporte sanitario. Fue rechazada con los votos de los partidos que apoyan al Govern. El PP votó a favor y el PI y Ciudadanos se abstuvieron. Todos los grupos intervinieron a favor o en contra y fijaron el sentido de su voto durante la sesión.