Una persona permanece ingresada en la UCI del hospital Mateu Orfila de Mahón. | Gemma Andreu

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El portavoz del Comité Autonómico de Enfermedades Infecciosas, Javier Arranz, ha comparecido este viernes en rueda de prensa para informar sobre la situación epidemiológica de Baleares en las últimas fechas del mes de abril, unas jornadas marcadas por la estabilidad salvo en el caso de Menorca, donde tres brotes han alterado la fotografía de la situación.

Acostumbrados a una casi inmejorable situación sanitaria en los hospitales y centros de salud, los menorquines han registrado en los últimos tres días tres brotes de coronavirus relevantes, todos ellos en entornos familiares y sociales, de 8, 14 y 4 positivos, respectivamente, que abarcan a personas de edades y perfiles diferentes.

Arranz ha informado, con respecto a esta situación, que el servicio de Epidemiología «se encuentra aun analizando los datos», y ha reconocido que, «pese a que haya subido la incidencia en la Isla, cuando relacionamos los casos con brotes» a través de la trazabilidad de los contactos «estamos más tranquilos», en el sentido de que «la transmisión no es comunitaria».

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En el conjunto de las Islas, el facultativo ha apuntado que estos pasados días las defunciones han aumentado por efecto de la actualización de las cifras de Epidemiología, unos fallecimientos datados «en el mes marzo e incluso de febrero», que habían quedado pendientes de un estudio exhaustivo.

El experto ha resaltado, una vez más, la buena noticia de que no se produzcan contagios activos en las residencias de gente mayor, y ha incidido en que las Islas han dejado atrás la Semana Santa «con unas cifras mejores de las que nos podíamos imaginar. Y eso no es por casualidad, es porque la población ha entendido qué podía hacer y cómo», así como el efecto de las restricciones que las autoridades siguen manteniendo, en su apuesta por una desescalada muy lenta en Baleares.

Finalmente, Arranz ha recordado que la práctica totalidad de los brotes detectados en las últimas semanas en Baleares tienen que ver con reuniones familiares o sociales. «Aun encontramos a personas con fiebre y síntomas que pese a ello hacen reuniones, fiestas, encuentros con amigos, o trabajan».

Debido a que esta no es «época de gripe, si tiene síntomas probablemente no será gripe y sí Covid», ante lo cual lo ideal es «autoaislarse en casa» y llamar a su médico para que le practiquen pruebas diagnósticas. Además, ha recordado que los síntomas más habituales son fiebre, dolor muscular, o cansancio, en concurrencia con otros como la pédida del olfato.