La presidenta del ejecutivo, durante sus respuestas parlamentarias. | Jaume Morey

TW
11

La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha asegurado este martes que la transparencia ha sido la «obsesión» del Govern desde el estallido de la pandemia.

Durante las preguntas al Ejecutivo en el pleno del Parlament, la presidenta ha defendido que desde marzo del pasado año ha habido ruedas de prensa semanales para explicar la gestión y la incidencia de la pandemia, así como multitud de comparecencias parlamentarias de conseller y altos cargos. Además, según Armengol, todas las medidas económicas y las restricciones se han explicado a la ciudadanía.

La presidenta del Govern ha respondido al portavoz del PP, Biel Company, que ha criticado que el Ejecutivo dijera que el Parlament iba a ser el epicentro de la gestión de la pandemia y el Govern tenga 1.400 preguntas sin responder y se pongan «trabas» a las labores de control del Govern por parte de los grupos políticos y se haya impedido la creación de una comisión de control sobre las ayudas estatales.

«Si no hay nada que esconder, ¿por qué buscan excusas?» ha preguntado Company a Armengol en referencia a la vacunación de altos cargos.

La líder del Ejecutivo ha asegurado, por su parte, que el Govern ha colaborado con el Estado y con la instituciones europeas y que se han conseguido hitos como los fondos europeos, a los que el PP votó en contra, la creación de una conselleria específica o el Pacto de Reactivación, donde el PP no está, «porque solo quiere destruir».

Lenta desescalada

Asimismo la presidenta balear ha defendido en la Cámara autonómica que la desescalada lenta de las restricciones que está aplicando el Govern en las Islas está logrando «mantener la situación sanitaria idónea» para poder «reactivar la economía poco a poco, de forma segura y controlada».

En el turno de preguntas de control al Govern en el pleno de este martes, la diputada de Ciudadanos Patricia Guasp, ha asegurado que la incidencia baja de la covid-19 en Baleares en comparación con la mayoría de las comunidades autónomas «debe llevar al Govern a reflexionar sobre la flexibilidad de las restricciones, horarios y la apertura del interior de la hostelería».

Armengol ha respondido que el Govern quiere «salvar vidas y proteger a la personas de contagios y a la vez reactivar la economía de forma segura», y que la forma de adoptar las decisiones es «haciendo caso a los expertos y a partir de aquí intentar hablar con todos».

Sobre el Consell de Govern del viernes, que adoptará las medidas para los próximos 15 días, Armengol ha afirmado: «Estamos intentando conseguir una desescalada lenta, que está dando buenos resultados, consiguiendo mantener una situación sanitaria idónea que permite salvar vidas y nos permite posicionarnos para reactivar la economía de forma segura, gracias al compromiso y la valentía de los ciudadanos de estas islas».

Noticias relacionadas

El cansancio de la ciudadanía

Guasp ha pedido a Armengol «una reflexión urgente y rápida» sobre las restricciones que siguen vigentes y ha advertido de que «no solo el sector de la hostelería y la restauración está sometido a situación económica desesperada, la ciudadanía está fatigada con tantas restricciones que en muchos momentos no se han sabido justificar ni explicar bien pro parte del Govern generando incertidumbre».

La diputada de Cs considera que hay que buscar «soluciones y alternativas a prohibir» y ha exigido a Armengol que encuentre «el equilibrio entre salvar vidas y la reactivación».

Guasp se ha mostrado de acuerdo con una desescalada lenta y prudente pero ha insistido en que considera que «es el momento de flexibilizar horarios y de hacer cirugía fina con las restricciones que se apliquen para no dejar más sin aliento al sector de la hostelería, al que han criminalizado con la responsabilidad de la transmisión del virus sin tener la trazabilidad de más del 80 % de contagios».

Ha anunciado que el grupo parlamentario Cs ha pedido por escrito los informes emitidos y todas las actas de las reuniones mantenidas con el Comité Autonómico de Gestión de Enfermedades Infecciosas en aras de la transparencia y «para conocer los indicadores y criterios que se utilizan para adoptar las restricciones y para dar confianza».

Qué pasó con el semáforo de niveles

Además, Guasp ha reprochado a Armengol que el semáforo de niveles de riesgo de la pandemia y sus correspondientes restricciones aprobado en noviembre «duró exactamente un mes y no han sabido explicar por qué ya no sirve».

Armengol ha explicado que lo nuevo que pasó en diciembre fue la irrupción de la cepa británica, «que aconseja ser más rigurosos con la desescalada y más contenidos» porque contagia siete veces más que el tipo de virus anterior.

«Así tuvimos una situación desgraciada en Ibiza en Navidad, donde se pasó de una incidencia de unos 50 a una incidencia de más de 2.000 casos que supuso más contagios, más muertos y desplazamientos desde Can Misses a Son Espases», ha detallado.

Ha indicado que entonces fue cuando se acordó hacer una desescalada lenta «que permita salvar vidas» para cuando se reactive la economía: «Estamos desescalando poco a poco y de forma prudente para mantener la situación sanitaria y reactivar la economía poco a poco de forma segura y controlada».

«¿Prefiere el equilibrio de Madrid, que son 218 muertos por cada 100.000 habitantes en contra de 64 por cada 100.00 habitantes? No lo comparto», ha dicho Armengol. «Estamos haciendo lo que toca», ha concluido.