Fue una de las imágenes icónicas del primer confinamiento: la solidaridad y los aplausos al personal sanitario que, diariamente, se producía en los balcones de las ciudades y pueblos. La imagen que ilustra esta página es de es Mercadal (Menorca). Cualquier apuesta pasa por la solidaridad. | Manolo Barro

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La «pérdida de valores democráticos» y el «cuestionamiento de la democracia» que instigan los partidos «autoritarios». Ambas circunstancias –y que afloran históricamente en tiempos de crisis– han hallado su caldo de cultivo por la crisis de la COVID. Así se describe en el documento que con el lema Horitzonts de futur per les Illes Balears está utilizando el PSIB parra describir la era pospandemia y encauzar su estrategia para los próximos años.

Se trata de un proceso de reflexión interna acordado en la última reunión del Consell Polític del partido y que centrará reuniones sectoriales que luego fundamentarán la toma de decisiones.

«Para poder encarar el futuro es necesario actualizar la escala de valores sociales para poder mirar el mañana con optimismo, esperanza, confianza y solidaridad», se precisa en el preámbulo del documento y que luego desarrolla los tres ejes de actuación sobre los que el PSIB quiere poner en marcha su actuación.

«Son los ejes de la socialdemocracia, naturalmente. Nos pusimos en ello en los días del confinamiento duro. Revisamos lo que habíamos hecho, nos preguntamos por lo que vendrá y observamos la realidad de nuestro entorno», explica Silvana González, secretaria de Organización del PSIB, que añade que «no estamos hablando de un programa electoral sino de un proceso de análisis que nos permitirá visualizar las Islas del futuro».

«La COVID-19 ha puesto de manifiesto la importancia de lo público pero también ha mostrado sus insuficiencias», señala texto que centrará el debate.

Disfunciones

Parte de que, aunque el personal de la Administración implicado en la provisión de servicios esenciales ha dado una respuesta «excelente con un comportamiento ejemplar de muchos colectivos profesionales», también «el sistema ha mostrado disfunciones» y que «más allá de los ajustes» es el momento de pensar en reformas estructurales. Valores, derechos y economía son los tres ejes de refuerzo del sistema público que es imprescindible construir desde «la solidaridad».

«Para que esta crisis no beneficie a las fuerzas políticas abiertamente autoritarias, los socialistas tenemos que gestionar la transición y el proceso de cambios del proceso transformador», plantea el PSIB en su reflexión.