Arranz y Gómez, en rueda de prensa para analizar la actual situación de la pandemia en las Islas. | Jaume Morey

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Las autoridades sanitarias de Baleares están muy preocupadas por lo que se avecina tras las reuniones y encuentros que se producirán en los próximos días en las Islas, con motivo de las fiestas de Navidad, cuando prevén que los contagios de coronavirus se incrementen todavía más.

El portavoz del comité autonómico de enfermedades infecciosas de las Islas, Javier Arranz, se ha mostrado tajante este miércoles, y sobre la evolución de la pandemia de COVID-19 en Baleares ha afirmado que «podríamos estar más tranquilos sin los encuentros de los próximos días».

Según su visión y en otro contexto, ha dicho, «podríamos esperar un pico de contagios dentro de quince días, y después una progresiva bajada». Sin embargo, las autoridades se temen que eso no será así; todo depende de la responsabilidad ciudadana en torno a las próximas fechas, y especialmente con respecto a las personas más vulnerables.

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Arranz ha comenzado su intervención en la rueda de prensa junto a la consellera de Salut, Patricia Gómez, ofreciendo un interpretación de los datos de última hora ofrecidos sobre el coronavirus en Baleares, donde la tasa de positividad supera el nueve por ciento.

En este sentido, el facultativo ha recordado que en una jornada con más de 600 positivos se han realizado 3.180 pruebas PCR en Baleares, cuando por ejemplo en Canarias se han practicado 1.300, o 2.300 en Madrid.

Finalmente Arranz ha recordado que cuando aumentan los casos de coronavirus, también lo hacen los profesionales de la sanidad infectados. En estos momentos permanecen 177 aislados y en vigilancia otros 404 sanitarios.