Un técnico del Cofib libera un ‘virot gros’ en Sant Elm,

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La Conselleria de Medi Ambient i Territori, la Iniciativa de Recerca de Biodiversitat de les Illes Balears y el Consorci per a la Recuperació de la Fauna de les Illes Balears (Cofib) son las entidades que impulsan las campañas de recogida de aves marinas, especialmente virots grossos y virots petits que, desorientadas por la iluminación de los núcleos costeros, se dirigen a éstos y se quedan en tierra, expuestas a atropellos, predadores o a la inanición.

Ivan Ramos, jefe del Servei de Protecció d’Espècies de la Conselleria de Medi Ambient, explica que «el impacto de este fenómeno no es excesivo, pero, en la medida de lo posible, hay que evitarlo. Afecta sobre todo a las crías de virot petit, a final de primavera y en verano, y de virot gros, en otoño. Estos pollos empiezan a volar y, al ver las luces de la costa, se dirigen hacia los núcleos urbanos. Una vez allí, se quedan en tierra y no saben qué hacer, en una especie de estado de shock».

De esta manera, las campañas intentan concienciar a los ciudadanos de que, en caso de encontrar algún ejemplar en estas condiciones, no lo suelten en la orilla ni intenten que reeemprenda el vuelo en algún otro lugar. Según Ramos, «lo mejor que puede hacer quien encuentre algún ejemplar es avisar al 112, al Cofib o a la Conselleria de Medi Ambient. Nosotros haremos una valoración del estado del ave, si se encuentra desnutrida o tiene algún otro problema, y procederemos a su anillamiento, lo que nos permitirá hacerle un seguimiento».

Aunque Ramos deja claro que éste no es el principal problema al que se enfrentan estas aves, los datos no son menores. Sólo en 20 días, entre el 10 y el 30 del pasado octubre, han entrado en el Cofib un total de 33 ejemplares de virot gros que fueron hallados al desorientarse por las luces de la costa: 10 de Mallorca, 14 de Menorca y 9 de Eivissa. La mayoría de ellos, tras ser atendidos, han podido ser liberados. En el caso de Mallorca, han sido liberados todos.

El jefe del Servei de Protecció d’Espècies destaca que «hemos colocado carteles en puntos estratégicos para informar a los ciudadanos de este tipo de situaciones y la verdad es que éstos responden muy bien. Tenemos muchos avisos de particulares».

Colonias

La desorientación de los virots se concentra, obviamente, en aquellas zonas donde existe una colonia de estas aves y un núcleo costero cercano. En Mallorca, dos claros ejemplos son la colonia del islote del Pantaleu respecto al núcleo de Sant Elm, en Andratx, y la colonia de las islas Malgrats respecto al núcleo del Toro, en Calvià.

Ivan Ramos señala que «en Baleares está vigente una ley de protección del medio nocturno desde 2005, pero no ha sido desarrollada a través de reglamentos. Una medida que podría evitar la desorientación de las aves marinas es instalar, con carácter general, luces de baja intensidad y, en el caso del alumbrado público, que las farolas lleven una protección superior que proyecte la luz hacia abajo, hacia la calle, que no se dirija hacia todas partes».

Estas campañas de divulgación para proteger a las aves marinas desorientadas cuentan con el apoyo de la Fundació Guillem Cifre de Colonya.