El conseller de Educació, Martí March.

TW
11

El conseller de Educació, Martí March, ha calificado la Lomce como «segregadora y elitista» y ha defendido su reforma. Igualmente, ha negado que la reforma prevista contemple aprobados y promociones automáticas.

El PP ha presentado este martes en el Parlament una interpelación dirigida al conseller de Educación, Martí March, en relación a la reforma de la Lomce, la conocida como 'ley de Celaá', especialmente al nuevo marco que permitiría obtener titulación sin haber aprobado todas las asignaturas.

La diputada del PP Nuria Riera, en la defensa de la interpelación, ha expresado el rechazo de su grupo a la reforma porque ataca a la libertad educativa, a la escuela concertada, al castellano como lengua vehicular, a la formación religiosa y a la inspección educativa.
Riera ha calificado la reforma como un «despropósito» a nivel estatal, refrendado por el Govern a nivel balear, que se escora «hacia la izquierda más radical» haciendo concesiones al nacionalismo que acabarán «pasando facturas a los alumnos».

El PP ha criticado especialmente la «promoción y la titulación automáticas» como un intento de maquillar el fracaso y la gestión educativa.

En su intervención, el conseller Martí March ha defendido la necesidad de una reforma de una ley «elitista y segregadora» en un contexto excepcional como el de la pandemia. Ante las acusaciones de sectarismo, March ha asegurado que la Lomloe cuenta con un gran consenso y ha negado que se trate de una ley «socialcomunista».

March ha negado, además, que la reforma contemple promoción y aprobados autonómicos sino que da competencia, como ya lo hacía la Lomce, según ha apuntado, a los equipos directivos.

El conseller ha pedido a la diputada popular que deje de enviar «mensajes catastrofistas» cuando habla de Educación y ha negado que contenga ataques a la concertada y a la enseñanza de la religión.