La restauración vive con cierto alivio la modificación del horario del toque de queda. | Teresa Ayuga

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El Govern balear pactó este lunes con las asociaciones de Restauración de CAEB, PIMEM y resto de islas, así como con los sindicatos, flexibilizar el inicio de las restricciones nocturnas de movilidad. De esta forma, se retrasa hasta las 00.00 horas, una hora más de lo inicialmente fijado tras la declaración por parte del Gobierno central del estado de alarma. La medida concede un alivio a los restauradores y también para la oferta cultural de las Islas y el resto de sectores productivos, como los transportes, ocio y la oferta hotelera. No obstante, el Ejecutivo lo tiene claro: Si la situación empeora se rebajará de nuevo el horario de cierre.

El conseller de Turisme i Treball, Iago Negueruela, tras finalizar la reunión con las patronales y sindicatos, afirmó: «El Govern ha estado abierto desde el primer momento a retrasar la hora de las restricciones a la movilidad nocturna. Todas las partes nos hemos comprometido en revisar la situación epidemiológica periódicamente, ya que en caso de que empeore se rebajará el horario de cierre. Es por ello, que pedimos la máxima concienciación a la ciudadanía para evitar modular el horario de cierre si el nivel de contagio no disminuye».

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Negueruela puntualizó que en estos momentos lo que urge «es revertir los actuales indicadores epidemiológicos y ser capaces de llegar a 2021 con unos niveles que nos permitan iniciar la temporada turística con normalidad y sin problemas».

Durante la reunión, el conseller transmitió al sector de la restauración su apoyo en esta difícil situación y que el Govern «seguirá priorizando en todo momento la salud y la seguridad de trabajadores y clientes, tal y como ha venido haciendo hasta ahora».