Unas 200 personas protestan contra la presencia de los Reyes en Mallorca. | Jaume Morey

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Unas 250 personas se concentraron ayer por la república y pidieron la marcha «de los Borbones» frente al Palacio de la Almudaina, utilizada por los Reyes como residencia oficial y protocolaria en Mallorca y donde otros años (este, no) se celebra la recepción que pone fin a sus vacaciones en las Islas. Lanzaron consignas, corearon lemas diferentes, improvisaron otros y cantaron. Desde L’Estaca a La internacional, pasando por una neo-versión de la Balanguera, titulada La Balanguera lluitadora y que dice en sus última estrofa: «La balanguera segará». Eso mostró la pluralidad de la convocatoria.

Es una de las características del republicanismo en las Islas: su carácter asambleario y sin disciplina de partidos –la presencia de representantes de Podemos y Més, que son los más próximos a la república fue prácticamente insignificante y no acudió ningún cargo de relieve si se exceptúa el coordinador de EU, Juan Carlos Martínez–- Todo el protagonismo se lo llevó el activismo.

Aunque el independentismo tiene una presencia relevante en el republicanismo de la Isla, las esteladas no eran las únicas banderas ayer ,y una de las novedades respecto a otros años fue cómo se hicieron notar (con sus propias consignas) una quincena de representantes del grupo Frente Obrero, que vestían de negro, llevaban banderas tricolores y coreaban las canciones del republicanismo histórico.

Manel Domenech, organizador, quedó satisfecho de la convocatoria. Fue él, y el activista Josep Juárez quienes informaron cómo debía celebrarse el acto para cumplir con el distanciamiento que marcan las normas de la pandemia. Cuatro policías observaban desde la puerta de la Almudaina. No se registró el más mínimo incidente. El acto terminó en las escalinatas que llevan al Parc de la Mar con una foto de grupo después de la lectura del manifiesto

Desde Llodio

«La institución monárquica, además de antidemocrática y anacrónica, es un instrumento funcional a los intereses del gran capital y de su sistema especula- tivo, basado en parasitar los bienes y servicios públicos y naturales, y los recursos y los derechos de la clase trabajadora y la mayoría social», indicaba el manifiesto que se leyó al final. «La lucha está en la calle y no en el Parlamento», coreaban desde Frente Obrero. Este grupo tiene presencia en toda España. De hecho sus lemas eran en castellano.

Entre quienes se manifestaron ayer, una pareja de Llodio (Álava) que suele venir a Mallorca los veranos: Txato y Carol. Dicen tener muy claro por qué estaban allí: «No queremos ni rey ni monarquía». «Que no vuelva», comentó el primero refiriéndose a la marcha del rey emérito. «Mejor que dé la cara y acabe como Urdangarin», añadió Carol.

Joan, entre el grupo de Frente Obrero, interpreta que «la fuga» es «la expresión de la corrupción de una institución que pretende irse de rositas mientras los trabajadores son despedidos de sus trabajos».

Hubo quienes llegaron en familia para manifestarse. Y se escucharon referencias expresas a la devolución de Marivent. Y a Valtonyc. «Los Borbones son unos ladrones y Valtonyc tenía razón», fue otro de los lemas de protesta. También sonó una de sus canciones.