Colas en el centro médico de s'Escorxador. | Teresa Ayuga

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Los sindicatos de médicos (Simebal) y de enfermeros (SATSE) explican que la situación en muchos centros de salud de Mallorca «es caótica».

«Enfermería no da abasto: detección de positivos COVID-19, pruebas PCR, rastreo, seguimiento telefónico, además de la demanda diaria, la atención a los crónicos, los domicilios y las urgencias», enumeran desde el sindicato.

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Los médicos lo definen como «una hemorragia masiva» y denuncian que se produce ante «la falta de inversión en Atención Primaria y a una muy mejorable gestión de la situación por parte del Govern». El Simebal critica que la contratación de rastreadoras es insuficiente y la labor la está asumiendo «los desgastados médicos de los centros de salud».

Advierten de que la consulta telefónica, junto con la presencial, mientras se mantienen los doble circuitos de pacientes y las visitas a domicilio, es un volumen de trabajo «inasumible» que lleva la saturación de las consultas.