Imagen de archivo de un avión en el aeropuerto de Palma. | Archivo UH

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La Autoridad Independiente de Responsabilidd Fiscal (AIREF) propone sustituir la subvención actual del 75 por ciento de residente por una subvención fija anual para cada una de las rutas, así como estudiar mecanismos para lograr una distribucion igualitaria de la subvención por niveles de renta. El estudio constata que la subida del descuento del 50 al 75 por ciento provocó un aumento en el precio de los vuelos que, hasta julio de 2019, fue del 15 por ciento en las Islas. El informe detalla además que el reparto de estas ayudas es muy desigual ya que la mitad de la población no vuela casi nunca, mientras que el 1 por ciento de los residentes que más voló acumula el 17 por ciento de las ayudas totales.

«Analizando las pautas de comportamiento de los residentes por niveles de renta se observan dos tendencias: las rentas altas vuelan más y compran billetes más caros. Consecuentemente, la subvención se concentra en las rentas más altas», dice el informe. De hecho, el 40 por ciento de las rentas más bajas de Baleares recibe el 21 por ciento de las ayudas.

La consecuencia es que se ha producido un notable incremento del gasto público, un 125 por ciento, y el gasto global ha pasado de 324 millones de euros en 2016 a 730 millones en 2019. El coste de los billetes ha descendido para los residentes en conjunto ya que la subida se compensa con el aumento del descuento, pero el precio para los no residentes ha aumento un 14 por ciento «algo especialmente relevante en comunidades con tanta especialización turística».

El informe ha analizado más de un millón de vuelos realizado entre Baleares y la Península y en vuelos interinsulares. Por todo ello, se propone aprobar una nueva legislación integral de movilidad e infraestructuras de transporte que defina criterios y objetivos comunes para todos los modos de transporte.