Paula Serra, Carmen Matutes, Magda Pons y Andrés Vidal, en el encuentro. | Ultima Hora

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La Associació Balear de l’Empresa Familiar (ABEF) ha analizado los efectos de la COVID-19 en la economía balear, mostrando su oposición al desconfinamiento propuesto por el Gobierno central, según se puso de manifiesto en el encuentro digital realizado en la tarde del jueves.

En la sesión participaron Rafael Roig, Maria Frontera, Andrés Vidal, Magda Pons Quintana, Carmen Matutes y Paula Serra.

Todos los participantes cuestionaron que se hayan planificado las fases de desconfinamiento «obviando los criterios empresariales y sin antes haber comunicado los protocolos que se deberán seguir en cada uno de los sectores».

Ante esta situación, la ABEF recalca que ante la falta de consenso en el desescalonamiento con los sectores productivos «se ha caído en ciertas incoherencias, como el hecho de dejar abrir hoteles, pero no abrir las playas o discotecas».

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aeropuertos de las Islas «lo que hará que hoteleros y servicios complementarios no podrán abrir sus puertas sin caer en un espacio muy corto de tiempo en gravísimos problemas de tesorería y liquidez».

Medidas
Todos los participantes en la videoconferencia han coincidido en que en la actual coyuntura «se necesita más que nunca un nuevo REB». En cuanto a la excesiva dependencia de la economía balear del turismo, hubo coincidencia general en que hay que hacer un planteamiento de distribución del actual sistema productivo y hacerlo más sostenible con sectores como el primario, industrial y el talento tecnológico.

La presidenta de asociación de la empresa familiar, Esther Vidal, ha recordado en la finalización del encuentro que las empresas familiares van a salir de esta crisis «porque está dentro de nuestro ADN».