Concentración de autocaravanas en primera línea de playa en sa Ràpita. | Pedro Aguiló Mora

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Las opciones vacacionales de alquiler se han ido ampliando con el paso de los años. Hasta ahora, teníamos que decidir si queríamos playa, montaña o ciudad para alquilar un apartamento, una casa rural, reservar un hotel o comprar un pasaje de avión. Ahora con el fenómeno del caravaning implantado en la Península y en Mallorca, la oferta vacacional se amplía con el alquiler de autocaravanas y la nueva modalidad de caravanas camper, que son mucho más versátiles y con mayor maniobrabilidad a la hora de aparcar o para desplazarse por las ciudades o pueblos.

De hecho y, según los datos que maneja la Asociación Española de la Industria y Comercio del Caravaning (Aseicar), la demanda de autocaravanas de alquiler superó en 2019 la oferta existente por segundo año consecutivo. En Baleares, con datos de 2018, el incremento de matriculaciones fue de un 179,1 %, según la patronal.

El contacto directo con la naturaleza y la libertad de movimientos sin prisas ni horarios son los grandes atractivos para miles de personas que han convertido esta opción vacacional en una de las más demandadas del país. Viajar en autocaravana permite llegar a rincones que de otra manera no se podrían descubrir. Una forma de ocio muy atractiva para familias, parejas y grupos de amigos.

Sin embargo, todo ‘boom’ tiene su lado negativo. Este es el caso, con la proliferación de ‘pseudo profesionales’ que surgen al inicio de cada temporada de verano. Es por ello, que Aseicar recomienda acudir a establecimientos oficiales donde poder comparar diferentes autocaravanas de su flota en función de las personas que vayan a viajar pues son renovados periódicamente. Son vehículos modernos actualizados, perfectamente revisados, con la documentación en regla y el seguro específico para alquiler.

Muchos mallorquines han optado por esta modalidad de vacaciones por la Península con resultados más que positivos. Experimentan por circuitos planeados por diferentes autonomías para comprobar la maniobrabilidad y realizar cualquier tipo de actividad.

«El viaje realizado por varias comunidades autónomas nos ha permitido coger experiencia y poder,con ello, planificar un viaje futuro por Centroeuropa. El nivel de satisfacción es óptimo y es recomendable, porque es otra forma de conocer lugares de forma libre y sin depender de horarios», señala Santiago Viedma tras el viaje realizado hace unos meses.

Los destinos elegidos por los mallorquines cuando se decantan por el extranjero son, entre otros, Francia, Italia, Austria y llegan a apostar hasta por Marruecos.

El propietario y gerente de Autocaravanas Palma de Mallorca, Luis Bauzá, explica que las peticiones de alquiler «van incrementándose de un año para otro porque la demanda crece en el mercado español y europeo».

Al respecto, indica que el turismo de autocaravana en Mallorca «es mayoritariamente español, ya que representa de momento el 80 %, y el 20 % es extranjero, principalmente de países europeos que llevan décadas apostando por este tipo de transporte para pasar sus vacaciones».

Las empresas especializadas en este sector en la Isla hacen todo tipo de recomendaciones a los clientes en cuanto rutas y oferta gastronómica, comercial y cultural.

Mallorca y gasto

En el caso de Mallorca la temporada fuerte se concentra en los meses de julio y agosto: «La demanda es muy variada, pero generalmente se trata de familias de tres o cuatro personas, así como de parejas, que alquilan la caravana por una media de siete días, aunque algunos se pasan dos semanas recorriendo la Isla. El coste medio oscila entre los 120 y 160 euros por día, pero ello depende del tipo de vehículo que se elija», puntualiza Bauzá.

Una cuestión en la que coinciden la patronal Aseicar y las empresas mallorquinas que operan en este sector es en el gasto que realizan los turistas de caravaning.

«Son una clientela muy positiva para Mallorca, porque gastan mucho en todo lo relacionado con la restauración. Generalmente desayunan y cenan a bordo, pero al mediodía optan por comer fuera en locales con precios medios. A parte, está todo el gasto que hacen en la oferta complementaria y en la comercial que existe en todas las zonas turísticas de la Isla, pero en concreto en Palma», explica Luis Bauzá.

Un fenómeno nuevo que también irrumpió con fuerza en 2019 fue el de los vehículos campers, furgonetas ‘customizadas’ más pequeñas que las autocaravanas, con un precio medio de 35.000 a -45.000 euros y que pueden ser utilizadas durante el día a día como vehículo particular. En el último año se han vendido 1.600 de estos campers, unos 180 mensuales.

Las caravanas también continúan con su línea ascendente. En 2019 se matricularon 2.399 lo su supuso un incremento de más de un 31 % respecto a las 1.829 matriculadas en 2018.

Con los datos de los últimos años, el parque móvil en España ha pasado de los 250.000 vehículos a los más de 300.000 entre caravanas (230.000), autocaravanas (60.000) y campers (10.000).

Aumento

También y por segundo año consecutivo, España es el país donde más crece proporcionalmente el caravaning convirtiéndose actualmente en la oferta de ocio vacacional en contacto con la naturaleza más demandada.

Aseicar, respecto a los camper, indica que el proceso de convertir una furgoneta normal en un vehículo de esta modalidad es conocido como «conversión a vehículo vivienda». A nivel estatal, como norma general, se considera una reforma de importancia y requiere su certificación de la ITV, que debe de ir acompañada de un proyecto de ingeniería y un certificado de fabricante del vehículo autorizando dicha transformación.

Su impacto en la Isla llega en ocasiones a provocar quejas de residentes en el litoral mallorquín, pero se trata de turistas muy respetuosos con el medio ambiente.