Momento de la reunión de Martí March con las asociaciones de directores de centros públicos de infantil y primaria, secundaria y de adultos del archipiélago. | M. À. Cañellas

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La Conselleria d’Educació propuso este miércoles a los directores de los centros docentes públicos de Primaria, Secundaria y Adultos de Baleares establecer límites a sus remanentes económicos según las características y tipología de cada uno de ellos, delimitando un abanico de tantos por ciento posibles para estos excedentes.

El conseller, Martí March, presentó esta propuesta a los directores y también anunció que el recorte de 1,8 millones de euros aplicado este año a los remanentes será devuelto en un plazo que puede abarcar de uno a tres años. Cabe recordar que los centros públicos de Balears acumulan remanentes por un importe superior a los 20 millones de euros. El recorte decidido para este año afecta a 215 de un total de 380 centros, y quedan fuera 165, que no veran tocadas sus cuentas.

March reconoció que, con esta medida, «ha habido algún problema de comunicación y se ha perdido confianza, pero estamos abiertos a matizar o modificar la iniciativa».

Decreto e instrucciones

En este sentido, la Conselleria modificará a lo largo de este año el decreto que regula la gestión económica de los centros, que data de 2002, aunque, en un plazo mucho más corto, aproximadamente un mes, se redactarían unas nuevas instrucciones.

El conseller consideró que «los remanentes de los centros son una cuestión que, en un momento u otro, tenía que abordarse, pero lo haremos con consenso. En cualquier caso, los centros tienen garantizado un funcionamiento suficiente, sin afectar a su autonomía.

No se trata de que la Conselleria se dedique a vigilar las cuentas de los centros, pero sí de establecer unas normas claras. En cuanto a las cantidades finalistas, éstas no se tocarán, pero los remanentes tienen que reducirse a unos niveles razonables».

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Los remanentes tendrán unos límites, pero asimismo podrán ser más o menos flexibles según los proyectos de inversión que los centros tengan en marcha. Según March, «las normas se adecuarán a las características de los centros y permitirán que cada uno de ellos tenga claro qué es lo que puede hacer y qué es lo que no, todo ello con agilidad, seguridad y autonomía».

Por su parte, los directores expresaron su satisfacción tras la reunión mantenida con el conseller y su equipo. Miquel Àngel Casesnoves, de la Associació de Directors de Secundària de Menorca, declaró que «hemos venido a escuchar las propuestas de la Conselleria y el resultado es muy satisfactorio y provechoso. Nos han presentado propuestas abiertas que son un punto de partida para debatirlas en los centros a partir de ahora. Con la Conselleria y las asociaciones de padres y madres crearemos un grupo de trabajo con el objetivo de tener instrucciones claras, revisando el presupuesto de algunos centros y con el compromiso de recuperar las asignaciones que se han visto reducidas».

José Luis Casillas, presidente de la Associació de Directors de Primària de les Pitiüses, señaló que «la Conselleria ha presentado propuestas a corto y medio plazo, con una voluntad de mejorar y aclarar la situación actual, pues las instrucciones de gestión económica se habían revisado y nadie nos advirtió de la medida de reducción, lo que era una incoherencia. La reducción de remanentes se recuperará».

Por último, Francisca Muñoz, presidenta de la Associació de Directors de Centres d’Adults de Baleares, calificó la reunión de «muy positiva, pues salimos más tranquilos. Se ha buscado un consenso para alcanzar una normativa mucho más clara, contando con el colectivo de directores en un grupo de trabajo. Resulta tranquilizador saber que los remanentes reducidos ahora se devolverán en un plazo de uno a tres años».

Las familias

El equipo de la Conselleria d’Educació se reunirá este jueves con las asociaciones de padres y madres. Para Martí March, «las familias tienen que formar parte de la solución en el grupo de trabajo creado a tal efecto. Es importante contar con su aportación y participación».

De esta manera, el conseller pretende que las asociaciones de padres y madres tengan acceso a una información directa sobre el estado de los remanentes económicos de los centros y puedan presentar sus propuestas.