El enfriamiento de la economía –el Govern habla de «normalización»– ha provocado un descenso en la compraventa de viviendas. | Redacción Digital

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El pinchazo en el número de compraventas de inmuebles en la Comunitat ya le está pasando una seria factura al Govern porque cada vez que alguien compra una vivienda de segunda mano tiene que pagar el impuesto de transmisiones patrimoniales. Si ese negocio se congela, el Govern deja de ingresar impuestos por esa vía y eso es lo que ha pasado en el primer semestre del año: la venta de casas ha caído y ha arrastrado consigo a los ingresos tributarios del Govern.

Hasta junio de este año, el Ejecutivo había ingresado por esta vía 211,68 millones, 20 millones menos que hasta junio del año pasado, es decir, un descenso del 8,95 por ciento. Pero si esa comparación ya resulta gravosa para el Ejecutivo, más lo es si se hace con las previsiones de ingresos que tenía para este año, es decir, con el cálculo que incluyó en los Presupuestos.

El Govern calculó que los ingresos anuales serían de 573,88 millones. Para ir bien encaminados y cumplir las previsiones, el Govern debería haber ingresado 286,94 euros hasta junio. El agujero ya es de 75 millones de euros por lo que la previsión para todo el año es que aumente hasta los 150.

El impuesto de transmisiones patrimoniales no es el único que sufre este comportamiento a la baja con respecto a lo previsto para todo el año. El Govern presupuestó unos ingresos totales de 1.124 millones pero a mitad de año solo ha recaudado 424,21. A esa cifra habría que añadirle la mitad de los 70 millones del impuesto de patrimonio, que se liquida a final de año, pero ni siquiera así parece probable que se cumpla lo previsto.

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En la Conselleria d’Hisenda admiten que las cifras no son buenas, aunque prefieren compararlas con lo recaudado el año anterior y no con la previsión presupuestaria. Un portavoz del departamento que dirige Rosario Sánchez insistió en que esta caída es una «normalización» del ciclo económico tras años de fuerte crecimiento y que ahora tiende a una cierta moderación.

El Govern cree que el desvío final de 150 millones con respecto a los Presupuestos no será tan elevado, pero sí calcula que el agujero rondará los 100 millones al final del ejercicio. El mismo portavoz señala que es preciso tener en cuenta que la economía alemana está al borde de la recesión técnica y que la situación económica de Balears está muy vinculada al comportamiento alemán.

El crecimiento económico de los últimos años quedó patente en las dos figuras tributarias del Govern más vinculadas al mercado inmobiliario, que son el impuesto de transmisiones patrimoniales y el de actos jurídicos documentados.

Los datos de recaudación de los últimos años han ido al alza, pero en 2019 es muy probable que haya un descenso. En 2014 se ingresaron por estas dos vías 358 millones que subieron a 459,02 en 2015 y a 544,28 en 2016. En el año 2017 sumaban 624,16 millones y en 2018, 635 millones.