Imagen de archivo de un usuario de una playa mostrando numerosas colillas tiradas en la arena. | Redacción Local

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El Consell de Ibiza ha repartido 200.000 ecoceniceros para concienciar y evitar que se tiren las colillas en playas y calas de la isla durante los meses de verano, ha informado la institución este miércoles en una nota.

La distribución de estos ceniceros forma parte de la campaña Ibiza Sostenible, con la que se busca dar solución a los desafíos medioambientales y sociales que representan los más de 3 millones de turistas que la isla recibe cada año.

Entre otros materiales, la institución también ha editado y repartido eco-botellas, bolsas y mochilas reutilizables.

Los ecoceniceros se encuentran a disposición de residentes y visitantes en las Oficinas de Información Turística (OIT) en los cinco municipios y también en el aeropuerto de Ibiza.

También incluyen un decálogo para ser un viajero más sostenible, que recomienda comer productos locales y de temporada, evitar los plásticos de un solo uso, utilizar duchas en lugar de baños y respetar la naturaleza al aparcar los vehículos.

Desde el Consell recuerdan que la campaña tiene como «doble reto» de preservar los recursos naturales y garantizar la calidad de vida de los residentes “sin renunciar al turismo como fuente de riqueza».

Para ello, se han impulsado iniciativas de promoción turística, movilidad sostenible, accesibilidad universal e innovación y desarrollo para empresas turísticas.

Al respecto, el director insular de Turismo, Vicent Torres, ha asegurado que, aunque se han dado muchos «pasos adelante» en los últimos años, tanto en Ibiza como en Baleares, «queda mucho trabajo por hacer entre las Administraciones, las empresas y la sociedad de Ibiza».

«Un ejemplo lo encontramos en que el 100% de las empresas turísticas da importancia a la sostenibilidad y a la conservación de los recursos naturales de la isla, pero solo un 3% incluye en sus programas acciones concretas en esta línea», ha señalado.

En materia de accesibilidad también se ha desarrollado el primer mapa interpretativo de la isla en relieve y braille, que cuenta además con un soporte que permite elegir entre leer textos o escuchar la locución en diferentes idiomas.