Así lo ha informado la entidad en un comunicado difundido este martes en el que han detallado que es «falso» que en un primer momento acudieran «unos pocos policías» y han asegurado que al desalojo acudieron «tres furgonetas» de la Policía.
Además, han censurado al «actitud» de la Policía al considerar que «estaba encaminada a impedir la legítima protesta» y han asegurado que «la carga la comenzaron los agentes». Así, han atribuido a «la rabia de los vecinos» el «choque a empujones» y ha relatado que los vecinos «acudieron espontáneamente al portal hasta que el jefe del operativo ordenó sacar las porras y empezó una carga injusta y desproporcionada».
En este sentido, Stop Desahucios ha afirmado que «todas las acciones de la policía persiguieron impedir el derecho de legítima protesta» y ha mostrado su «orgullo» por el «valor» demostrado por la familia durante 21 meses que han calificado de «acoso inmobiliario».
«No tenemos miedo alguno y no permitiremos que los porrazos de cuatro fanáticos con uniforme pare la movilización social en defensa del derecho a una vivienda digna y al resto de derechos laborales, sociales y democráticos», han zanjado.
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