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Cientos de personas han madrugado este sábado para asistir una vez más a la Fiesta de la Luz que se da dos veces al año tras la salida del sol en la catedral de Mallorca.

Se trata de un efecto lumínico excepcional, conocido popularmente como 'el espectáculo del 8' por la forma que presenta, que consiste en la proyección cromática del monumental rosetón del templo que preside el altar mayor sobre la fachada principal.

Esta circunstancia se da de una manera idéntica los días 11 de noviembre y 2 de febrero.

Según fuentes de la Seu, unas ochocientas personas se han congregado este sábado, algo menos que en ocasiones anteriores por las previsiones meteorológicas.

El fenómeno se ha podido seguir bien gracias a un tímido sol que ha colaborado; sin embargo, cuando 'la figura del 8' estaba en su culmen han llegado unas inoportunas nubes que han deslucido el mejor momento.

A pesar de la desilusión final, los aplausos se han dejado oír cuando el sol brillaba con intensidad dando realce a la figura.