En varios de los casos expuestos la arquitectura ha logrado poner en valor espacios cerca del mar o ríos, de los que no se estaba aprovechando todo su potencial. | M. À. Cañellas

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Endesa está dispuesta a ceder un parque a la ciudad a cambio de construir un edificio destinado a viviendas en uno de sus solares de la fachada marítima. Desde la eléctrica lo definen como «un edificio emblemático, icónico, del futuro, inteligente y con la máxima eficiencia energética» y ponen como ejemplos casos similares de otras ciudades.

En este sentido, destacan la Ría de Bilbao, los parisinos Euromediterranée o el Pompidou, el Hafencity de Hamburgo y el Espacio Torre Sevilla de la capital andaluza. En todos estos casos, la arquitectura ha logrado poner en valor espacios cerca del mar o ríos, de los que no se estaba aprovechando todo su potencial.

Desde Endesa argumentan que esto es lo que le ocurre a la fachada marítima, y aseguran que con la construcción de un edificio emblemático se podría dar un valor añadido a la ciudad, que incluso podría atraer a turistas en temporada media-baja. «Estamos dispuestos a compartir el frente marítimo de la ciudad, regalando un parque y construyendo un edificio icónico», declaran. Para lograr este objetivo, barajan convocar un concurso internacional de ideas. «El edificio daría valor a la fachada marítima desde el punto de vista arquitectónico e industrial», añaden.

En cuanto a las características y dimensiones del inmueble, desde la eléctrica insisten en que están abiertos a todo y reiteran que lo más importante es encontrar una solución que sea satisfactoria para la empresa y la ciudad. No obstante, precisan que son una empresa privada que debe rendir cuentas a sus accionistas, por lo que es necesario compensar los 37.740 metros cuadrados de edificabilidad residencial que tienen en la primera línea de la fachada marítima.

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Sin embargo, señalan que hay muchas formas de compensarla, siempre teniendo en cuenta la construcción de un edificio destinado a viviendas en uno de sus solares. En este sentido, habrá que analizar si con la construcción del citado inmueble es suficiente o si Cort también debería entregar los solares que tiene en segunda línea; suman 58.300 metros cuadrados de edificabilidad.

Cabe tener en cuenta que el Tribunal Superior anuló el planeamiento aprobado por el gobierno de Aina Calvo, que daba dos metros en segunda línea por cada metro de la primera. Por tanto, todo apunta a que Cort tendrá que aumentar los metros de compensación -los técnicos municipales están elaborando un estudio-, ya que es obvio que un solar de primera línea tiene mucho más valor que otro ubicado en la segunda.

La eléctrica también está dispuesta a incluir en las negociaciones al edificio Gesa, que tiene 15.000 metros cuadrados de edificabilidad. Para el gobierno tripartito de Cort este inmueble, declarado Bien de Interés Cultural (BIC), supone un emblema y así lo reflejaron en sus programas electorales de los comicios celebrados en 2015. Para Endesa, conservar este edificio tiene más inconvenientes que ventajas, ya que padece una importante degradación, su eficiencia energética es muy deficiente y al estar protegido tiene un margen de actuación limitado, al tiempo que debe contar con el visto bueno de la comisión de Patrimonio del Consell de Mallorca.

Si el Pacte acepta la propuesta de Endesa, Cort se evitaría tener que pagar posibles indemnizaciones millonarias. Los técnicos de la eléctrica están elaborando informes para cuantificar la cantidad que reclamarán por no haber podido utilizar sus propiedades desde el año 2009 y por el deterioro que ha sufrido el edificio Gesa. Además, se pondría fin a la degradación de una de las zonas más emblemáticas de Ciutat, que dejaría de estar inmersa en una maraña judicial.

El Col·legi d’Arquitectes hace años propuso como solución la construcción de uno o varios inmuebles en primera línea.