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La compra de viviendas por parte de extranjeros aumentó un 9,8 % en Baleares entre enero y septiembre de 2017 en relación con el mismo período del año anterior y supuso más del 30 % de la adquisición del mercado inmobiliario de las islas, según un informe elaborado por el Departamento de BBVA Research.

El estudio «Situación inmobiliaria España» indica que la exposición del mercado inmobiliario español a la demanda extranjera se mantiene elevada y creciente.

En el tercer trimestre del año, el peso de la demanda extranjera ha subido un 17,5 %, ligeramente por encima del segundo trimestre, con el 16,9 %, y del primero con 16,7 %.

En los nueve primeros meses del año los extranjeros adquirieron 66.190 viviendas en España, un 15 % más que en el mismo periodo de 2016, lo que supone el 17 % del total de ventas en el periodo.

Reino Unido continuó siendo el principal país de origen de los demandantes extranjeros. Entre marzo y septiembre adquirieron el 14,8 % de las viviendas compradas por los foráneos, 0,3 puntos porcentuales más que en los tres meses anteriores, según los datos de la Estadística Registral Inmobiliaria.

Aunque como consecuencia de los efectos de la consulta que llevaría al brexit, los ingleses han reducido la compra de viviendas en España, ésta parece haberse estabilizado. Franceses, alemanes y belgas e italianos siguen siendo el resto de nacionalidades más demandantes de vivienda en España, según los datos del Registro de la Propiedad.

En términos absolutos, los extranjeros siguen decantándose por el litoral mediterráneo, Madrid y Canarias a la hora de adquirir una vivienda en España. Alicante y Málaga, siguen siendo las provincias donde más viviendas compran los extranjeros, seguidas de Barcelona y Madrid. Estas cuatro provincias se aglutinan más del 50 % de las operaciones.

En términos relativos, la relevancia de las compras de extranjeros en los nueve primeros meses de 2017 fue mayor en Alicante y Tenerife, donde casi el 50 % de las viviendas vendidas fueron adquiridas por extranjeros. El peso supera el 30 % en Baleares, Las Palmas, Málaga y Girona.