«Si Baleares es la comunidad autónoma que más padece el expolio del Gobierno español, Palma es la capital más expoliada», ha manifestado en una de sus cartas abiertas a la ciudadanía. | M. À. Cañellas

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El alcalde de Palma, Antoni Noguera, ha reclamado un sistema de financiación justo para la capital balear, pues asegura que ha crecido mucho en los últimos años y aporta al Estado mucho más dinero del que recibe.

«Si Baleares es la comunidad autónoma que más padece el expolio del Gobierno español, Palma es la capital más expoliada», ha manifestado en una de sus cartas abiertas a la ciudadanía.

Noguera ha criticado que el Estado justifica el traspaso de recursos entre comunidades apelando a la solidaridad entre regiones, mientras que Baleares ha pasado en 20 años de ser ocupar el primer lugar en renta per cápita a ocupar el séptimo.

Además, ha recalcado que se debe tener en cuenta los precios, pues el coste de la vida en Baleares es más alto que en otros territorios, por lo que las Islas se sitúan debajo de la media española en renta por habitante.

«Continuamos siendo la comunidad que aporta más recursos por habitante al Estado y no recibimos lo que necesitamos, todo perpetuando de esta manera el episodio de expolio fiscal», ha añadido.

En este sentido, ha explicado que si Baleares aporta cada año al Estado el 14,5 por ciento de su PIB, es decir, unos 3.500 millones de euros «que no vuelven», eso significa que cada ciudadano de las Islas hace una aportación neta de cerca 3.500 euros. Si la aportación de cada ciudadano se multiplica por los 400.000 habitantes de Palma, los ciudadanos de la capital balear envían más de 141 millones de euros al año a Madrid.

Refiriéndose a Palma como «capital del país», el alcalde ha indicado que es una ciudad que «ha crecido mucho» en los últimos años, por lo que cada vez necesita más inversiones en equipamiento público, unas necesidades que «ahora son superiores a las de las regiones que reciben nuestra 'falsa' solidaridad sin tener tanta demanda social».

El alcalde de la capital balear ha vuelto a abogar por garantizar el acceso a la vivienda y ha señalado que, si en estos momentos Palma tiene un 1 por ciento de viviendas de protección oficial, el objetivo para los próximos años es llegar el 10 por ciento y dedicarlo al alquiler social público, algo difícil de conseguir «sin los recursos que generamos y que de momento no retornan a la ciudad».

También ha hecho hincapié en el gasto que generan los turistas que consumen recursos y servicios municipales, sobre todo en verano. Así pues, ha señalado la importancia de un sistema de financiación justo para impulsar la reconversión de zonas turísticas maduras como el Arenal.

«Es absolutamente indispensable mejorar la financiación para asegurar el éxito de la ciudad. No podemos ser los que más pagamos y continuar estando por debajo de la media de los que reciben», ha reiterado.