El consistorio se queja de los efectos de una fiesta 'Holi' en el Parc de la Mar de Palma. | Redacción Digital

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El Ajuntament de Palma ha recordado en una carta enviada a entidades y asociaciones vecinales que las fiestas Holi no están autorizadas en espacios públicos de la ciudad, dado que generan problemas de seguridad, sanidad e imposibilidad de limpieza por motivos técnicos.

Estas fiestas, que se han puesto de moda en los últimos años, consisten en lanzar al aire polvos tintados de diferentes colores, que caen al suelo y se pegan mucho al pavimento, según recuerda el consistorio en un comunicado.

Así, estos residuos no se pueden limpiar de forma manual y en los espacios donde se solicita la celebración de fiestas Holi no pueden acceder los vehículos de limpieza que se requieren para retirarlos de forma adecuada y volver al espacio a su estado original. En una ocasión en que se realizó una fiesta Holi el parc de la Mar, se dañó muy considerablemente el pavimento de piedra arenisca, según incide el ayuntamiento.

Además, en cuanto a la salud, el polvo en suspensión de estas celebraciones puede ocasionar problemas respiratorios, y se ha planteado la necesidad de que sería conveniente contar con una ambulancia medicalizada. Además, en caso de que se hagan, se deberá instalar cartelería informando a las personas con afecciones respiratorias o alergias que estarán expuestas a mayor riesgos, así como informar del tipo de polvo que se utilizará.

Por otra parte, el área de Sanidad indica que «en ningún caso se pueden considerar compatibles en el mismo lugar las actividades de manipulación de alimentos con el eventual ejercicio de fiestas tipo Holi».

Durante los últimos meses, en sucesivas reuniones, Cort ha ido informando puntualmente a las entidades que impulsaban estas celebraciones.

Fiesta de agua en Palma

De igual modo, el gobierno municipal avisa que la situación de prealerta de sequía obliga a no autorizar ninguna fiesta del agua con agua subvencionada.

«El Ayuntamiento sólo autoriza esta actividad si es con agua comprada por los organizadores (un camión cuba grande, de más de 10.000 litros tiene un coste aproximado de 50 euros). A pesar de ello, Cort anima a las entidades a organizar juegos y actividades alternativos que no supongan un derroche» de este recurso tan preciado, afirma el mencionado comunicado.