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La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha negado que el ejecutivo haya dado marcha atrás en la exigencia del conocimiento del catalán al personal del IB-Salut y ha señalado que trabaja para garantizar tanto atención sanitaria pública como los derechos lingüísticos de sus usuarios.

En el pleno del Parlament, el portavoz de Ciudadanos, Xavier Pericay, ha reprochado a Armengol que sus socios de MÉS «han puesto el grito en el cielo» por la moratoria al exigir el conocimiento del catalán para el personal estatutario del Ib-Salut, ya que «será de aplicación en el plazo de 2 años, hacia finales de febrero de 2019, cuando ya prácticamente no quede legislatura».

Pericay le ha preguntado a Armengol si la Conselleria de Salut rectificará ese plazo de 2 años para que se aplique la obligatoriedad del catalán como ha asegurado MÉS.

Armengol ha defendido que el Govern ha hecho posible «el retorno de derechos lingüísticos que habían sido perseguidos durante una legislatura nefasta de una mayoría absoluta del PP en cuanto a la lengua propia de la comunidad autónoma».

Ha recordado que uno de los acuerdos del pacto de legislatura era la reforma de la Ley de Función Pública para volver a la normalidad y que el conocimiento del catalán fuera un requisito para el acceso y la promoción en la función pública, cambio que ya se ha aprobado y que fija un plazo de un año para desarrollar las cualificaciones de catalán que debe tener el personal sanitario.

Sobre ese desarrollo legislativo, Armengol ha dicho que «el decreto está en trámite de audiencia». «Es un reglamento que aún está en proceso de negociación y no hay nada cerrado y definitivo», ha subrayado.

«Tendremos en cuenta las especiales circunstancias para garantizar la correcta prestación del servicio sanitario y lo haremos compatible con los derechos lingüísticos de los usuarios que también tienen derecho a ser atendidos o poderse expresar en catalán», se ha comprometido Armengol.

La presidenta ha añadido que el Govern ofrecerá además las herramientas necesarias para que el personal tenga la cualificación de catalán que se les exige.

Pericay ha insistido en que esta cuestión ha puesto de manifiesto «un choque entre una Conselleria y sus socios de gobierno», y «otro choque de las políticas del Govern con la realidad», porque considera que la moratoria se debe a la intención del ejecutivo de «no tener problemas en la sanidad y poder tener la legislatura en paz».

«Ustedes mucho envalentonarse pero a la hora de la verdad siempre dan pasos atrás», ha reprochado el portavoz de Ciudadanos.

Armengol ha replicado: «No veo ningún paso atrás, simplemente veo el cumplimiento de la palabra dada de un Govern que tiene claro que ha de garantizar los derechos lingüísticos de los ciudadanos de estas islas, con la modificación de la Ley de Función Pública».

«Si a usted le preocupa el grado de conocimiento de la lengua propia que tienen los profesionales de la sanidad a mí me preocupa también cómo garantizamos la sanidad pública y hemos mejorado muchísimo», ha asegurado la presidenta, quien ha recordado que se ha ampliado el horario de atención de los centros de salud, se ha elaborado un plan de infraestructuras sanitarias y además también se garantizarán «los derechos lingüísticos de los ciudadanos de Baleares».