Huertas y Seijas, de espaldas, el miércoles. | Jaume Morey

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La salida inminente del grupo parlamentario de Podemos de Xelo Huertas y Motse Seijas no rompe sólo la mayoría de izquierdas y altera el reparto de las comisiones, sino que impide garantizarse el apoyo para sacar adelante grandes reformas y nombramientos que sólo podían alcanzarse sumando sus 34 votos a los 3 del PI.

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En las elecciones de autonómicas de 2015, la izquierda consiguió una mayoría histórica, 34 escaños en el Parlament y siempre podía contar con el ‘colchón’ del PI para determinadas propuestas. Ahora mismo, el Govern no puede plantearse propuestas como una reforma electoral y hasta la propia aprobación del reglamento del Parlament puede tener problemas añadidos.

El PP quiere aprovechar esta situación. En el PSIB y en Més dan por hecho un «pacto tácito» entre el PP y Xelo Huertas.