Una galera de Palma lleva auna pareja de turistas. | M. À. Cañellas

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El Ajuntament de Palma ha destacado este lunes que trabaja para mejorar las condiciones de las galeras y de los animales que prestan el servicio y ha indicado que está estudiando trasladar la parada de la calle Conqueridor para que se ubique en «otro lugar que reúna las condiciones óptimas».

Según han informado las áreas de Movilidad y de Ecología, Agricultura y Bienestar Animal, además se está trabajando en la modificación de la ordenanza actual y desde hace tres semanas se han intensificado los controles y el seguimiento de los animales, como ya se hizo el pasado verano.

En rueda de prensa, el regidor de Movilidad, Joan Ferrer, ha recordado que desde hace meses ambas áreas mantienen reuniones con los conductores de las galeras para trasladar la parada de Conqueridor a otro lugar, si bien todavía éste está por definir.

«La calle se encuentra en una pendiente y esto supone un doble esfuerzo para el animal, puesto que están parados en una pendiente y, además, tienen que hacer un sobreesfuerzo a la hora de empezar la marcha», según Ferrer. La nueva ubicación tendrá que tener una salida de agua corriente para que los animales puedan beber y puedan ser lavados, además de alcantarillas. Actualmente, en Palma hay 28 licencias concedidas, 15 de ellas en la parada de la Catedral, ocho en Conqueridor y cinco en s'Arenal.

Revisión del reglamento

Por su parte, la regidora de Ecología, Agricultura y Bienestar Animal, Neus Truyol, ha recordado que se está llevando a cabo una revisión del reglamento municipal del servicio de transporte urbano de viajeros con vehículos de tracción animal con conductor.

«Se trata de una norma ambigua que da pie a interpretaciones diferentes», ha dicho Truyol. Además, desde hace tres semanas se han intensificado los controles y el seguimiento de los animales y se están llevando a cabo controles semanales «para verificar cuántas horas de trabajo hacen los caballos» y que «no se excedan».

También se hacen «revisiones completas de los animales, de las caballerías y carruajes y se revisa el número de pasajeros que llevan», según Truyol. Esto se hace para «hacer cumplir la normativa vigente», para conseguir «el bienestar de los animales y una buena calidad del servicio que se presta», ha indicado la regidora, que ha apuntado que, de momento, ya se han retirado dos caballos del servicio y se han abierto varios expedientes.