Michiel Magnier ha hecho un esfuerzo por destacar el lado positivo y agradecer «la solidaridad del pueblo balear» a pesar de este «ataque a nuestros valores occidentales», que ha tenido lugar «apenas diez meses después de los atentados contra 'Charlie Hebdo'».
«Hoy es Francia, otro día puede ser otro país», ha dicho Magnier, que sin embargo ha llamado a la «serenidad».
Magnier ha recordado que «en Francia los momentos son muy difíciles», en los que el presidente de la República, François Hollande, ha tomado «medidas excepcionales».
El cónsul francés se ha reunido, antes del minuto de silencio, con la presidenta del Govern, Francina Armengol. Tras el encuentro, Magnier ha apostado «por nuevas vías de colaboración y cooperación» en Balears, que incidan «en mayor cultura y formación de nuestros jóvenes» para que «conozcan que el mundo es muy global».
Ha insistido en lanzar «un mensaje positivo» y se ha hecho eco de las palabras de la presidenta: «No nos van a vencer».
«Hay que luchar contra ellos. Trabajaremos mirando al futuro con una sonrisa», ha concluido Magnier.
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