Catalina Cladera, en una reciente comparecencia en el Parlament. | M. À. Cañellas

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La consellera de Hacienda y Administraciones Públicas, Catalina Cladera, ha asegurado este martes que la subida del impuesto de sucesiones en 2016 solo afectará al 4 % de la población, la que dispone de más recursos y cuando la herencia sea superior a los 700.000 euros.

La consellera ha señalado que el detalle de la modificación de este impuesto se dará a conocer con ocasión de la ley de presupuestos de 2016.

Cladera ha sostenido que no es justo ni equitativo que la transmisión de una herencia de 7 millones tenga un gravamen de un 1 %, lo mismo que una herencia de hasta 700.000 euros.

Por ello, el Govern subirá la progresividad de este impuesto a partir de los 700.000 euros. Un 96 % de las familias, ha subrayado, continuará pagando un 1 %.

«Este Govern tiene claro que no subirá los impuestos a las clases bajas, medias y trabajadoras», ha declarado Cladera, que ha añadido que el principio de la política fiscal del ejecutivo es que «quien tiene más, contribuye más».

Por su parte, el diputado del PP Antoni Camps ha criticado al Govern por «ir a los más fácil, lo más sencillo y lo más cómodo: subir los impuestos».

Camps ha señalado que el actual ejecutivo se ha encontrado con una situación financiera «muchísimo mejor» que el PP, por lo se podrían bajar los impuestos en las islas, tal y como hará el gobierno del PP en Galicia, un «ejemplo de buen gestión» donde el 99 % de la población no pagará en 2016 el impuesto de donaciones y se bajará el tramo autonómico del IRPF.