El Consell está dispuesto a acabar con el «actual descontrol y preocupantes carencias» en la instalación de bocas contra incendios en Mallorca.
Un estudio que se está realizando en la actualidad ha revelado que en algunas localidades no existe el servicio y en otras o ha quedado a medio instalar o las bocas no funcionan. El Consell destinará un total de cuatro millones de euros y actuará en la práctica totalidad de las ciudades y pueblos de menos de 20.000 habitantes que carecen en la actualidad de una estructura de seguridad contra incendios «que puede considerarse adecuada». En total, más de 40 municipios de Mallorca.
Las ciudades y núcleos que quedan excluidos son Palma, Calvià, Llucmajor, Inca, Manacor y Marratxí. El resto podrá acogerse a este plan de seguridad a gran escala.
El director insular de Cooperació Local, Joan Manera, afirma que el Consell de Mallorca cree «prioritario» dotar a los pueblos «del máximo nivel posible de infraestructuras, y más en materia de seguridad».
Mal estado
El estudio que realiza el Consell ha puesto al descubierto que en algún pueblo existen canalizaciones subterráneas ya preparadas aunque jamás llegó a instalarse el hidrante. «Con el tiempo, la canalización ha sido tapada con asfalto». En otros casos, la boca está instalada, «pero carece de infraestructura en el subsuelo. Es tan solo fachada».
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