Primer Pleno ordinario de la lesgislatura que se celebró este jueves en el Consell. | Teresa Ayuga

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El pleno del Consell de Mallorca no sometió este jueves a votación la primera medida que servirá para blindar Mallorca de la importación de residuos y se esperará a septiembre para volverla a llevar al plenario.

El Departament de Medi Ambient quería que se votase la solicitud al Govern para que derogue el artículo 19 de la Ley de medidas urgentes de reactivación económica que permite la importación, si bien la moción de Proposta per les Illes (PI) hizo que la consellera de Medi Ambient, Sandra Espeja, optase por retrasar la votación y poder llegar a un acuerdo con el resto de formaciones. De momento, solo el PI, a parte del tripartito, ha mostrado su intención de apoyar los planes de paralización.

La consellera Catalina Soler (PP) acusó a Espeja de «no haberse reunido aún con las empresas concesionarias para abordar las posibles indemnizaciones a las que tendrán que hacer frente». Espeja anunció que la próxima semana empezará la ronda de reuniones, y lo hará con TIRME.