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El cabeza de lista de MÉS per Mallorca al Consell en las pasadas elecciones, Miquel Ensenyat, ha tomado posesión del cargo de presidente de la institución insular este sábado, en una ceremonia en el Palacio del Consell en Palma, tras conseguir el apoyo de PSIB y Podem, que le han garantizado 18 votos favorables a su investidura frente a 12 en contra y 3 abstenciones.
La Mesa ha propuesto como candidato a Miquel Ensenyat, de la coalición MÉS per Mallorca, al ser el que ha conseguido más apoyos. Francesc Miralles (PSIB) y Jesús Jurado (Podem) serán el vicepresidente primero y segundo.

Ensenyat ha llegado al Consell poco antes de las 11.30 horas, donde se ha fotografiado con varios transeúntes. Después ha entrado en el edificio acompañado del segundo teniente de alcalde de Modelo de Ciudad, Urbanismo y Vivienda Digna del Ayuntamiento de Palma Antoni Noguera.

El acto, al que también han asistido la presidenta del Govern, Francina Armengol, y la presidenta del Parlament, Xelo Huertas, ha comenzado con la constitución de la Mesa de Edad, formada por los consellers electos de mayor y menor edad.

Posteriormente, se ha nombrado a los 33 consellers electos, que se han acercado a la mesa para prestar juramento «por su conciencia y honor, con lealtad al Rey y a la Constitución y el Estatuto de Autonomía», como dicta el protocolo. Como ya habían hecho los candidatos de MÉS y Podem en los actos constitutivos de otras instituciones, han añadido «por imperativo legal y sin renunciar al derecho a decidir de los pueblos», entre otras fórmulas, antes de decir «sí, prometo». Asimismo, Maria Salom y Catalina Cirer, a diferencia del resto, han jurado su cargo sobre una Biblia.

Finalizado este apartado, Ensenyat ha sido designado candidato a la presidencia tras acreditar los apoyos necesarios, y ha realizado su discurso de presentación de programa, en el que ha asegurado que no es sólo el candidato de MÉS sino también el del PSIB y Podem, para solicitar la confianza de la Cámara.

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Durante este discurso, Ensenyat ha admitido que el Consell ha sido «una institución cuestionada», por lo que ha insistido en la necesidad de mejorarla, y ha defendido el apoyo a los más desfavorecidos ante una crisis «que ha resultado ser una gran estafa».

Ensenyat ha defendido también el apoyo a la industria audiovisual, el fomento de la participación, la elaboración de un nuevo Plan Territorial y un nuevo Plan de Residuos y la colaboración con los Ayuntamientos, entre otros asuntos. Ensenyat ha anunciado que lo primero que hará en la institución insular será detener la «aberración» de la importación de residuos en la isla.
Ensenyat ha admitido que el panorama tras las elecciones autonómicas «es sin duda complejo», especialmente porque se ha pasado a tener representación de tres grupos políticos (PSIB, PP y MÉS) al doble (con la llegada de PI, Podem y Ciutadans a la institución insular).

Uno de los primeros puntos a los que se ha referido el discurso de Ensenyat ha sido la Serra de Tramuntana, para la que ha defendido «una buena red de caminos públicos, abierta y en condiciones», inversión en seguridad de carreteras «como lo vienen reclamando los cicloturistas», potenciar el pequeño comercio, la artesanía y el producto audiovisual. Ensenyat también ha abogado por fomentar la participación de los Ayuntamientos y la efectividad del IMAS.

Especialmente contundente ha sido al aludir la importación de residuos, que ha prometido eliminar: «Lo primero que haremos será acabar con esta aberración de importar basura de otros países de dudosa procedencia para quemar en la incineradora de Son Reus», ha declarado.

En este sentido, ha anunciado que abrirán un proceso de debate social para hacer un nuevo Plan de Residuos. También ha avanzado un nuevo Plan Territorial que elimine «la idea de que la tierra en Mallorca es siempre una oportunidad para especular y destruir».