José Ramón Bauzá. | Joan Torres

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Francina Armengol será elegida este martes presidenta del Govern con el apoyo de 34 diputados de izquierdas más una postura nada agresiva de El PI mientras el PP Balear está prácticamente partido en dos y sin posibilidades reales de poder articular una oposición efectiva.

Mientras en otros lugares de España, comenzando por Madrid, la llegada de la izquierda a los despachos enmoquetados ha provocado una oposición crítica del PP desde el primer momento, en Balears «la asunción del poder por parte de la izquierda es un paseo militar».

En el debate de investidura «Bauzá se esconde. Trata de mantener el poder interno a toda costa y abandona la pugna con la izquierda. Tendrá que ser la novata Marga Prohens la que lleve el peso del debate y la van a machacar», comentan en el PP.

La izquierda oficiará la toma del poder con una tranquilidad absoluta. En otras circunstancias el hecho de que Podemos no entre en el Govern y permanezca agazapado a la espera de las elecciones generales podría ser motivo de un intenso debate político. Pero no es así. Bauzá, con su empecinamiento está cortando las alas al PP. «La izquierda tiene campo libre para imponer las medidas que quiera», reconocen, con sorna, fuerzas progresistas, indicando que «ahora nuestro adversario somos nosotros mismos, no ellos. ¡Que dure!».

Y va a durar

Por el camino que lleva, el PP tardará muchos meses antes de sacar la cabeza. Al conseguir desactivar el levantamiento de Binicomprat Bauzá retomó el pulso del poder. «Si se va antes del 15 de julio es porque quiere, porque todo el mundo ve que será imposible encontrar un candidato de consenso que gestione el partido hasta el congreso de 2016. Bauzá hizo la pirula a los regionalistas y, encima,el madrileñista Carlos Delgado se rió de ellos a la cara llamándoles energúmenos».

Además, Bauzá se ha mostrado como un hábil manipulador de imputados. Impidió que Pere Rotger se haga cargo del partido a causa de su imputación en Over Márketing, «pero su principal apoyo es José María Rodríguez, intocable presidente del PP-Palma, ¡también imputado en Overn Márketing! Bauzá no se lo critica a este dirigente, porque es suyo, pero se cepilla al adversario. Eso es cinismo». Encima, Bauzá nombró portavoz adjunto a Antoni Pons, causa de la revuelta regionalista, «¡que también está imputado!».

Así, todas las propuestas de un hombre de consenso para conducir al partido hacia el congreso «irán cayendo una tras otra de uno y otro lado. El senador Bauzá será el amo, desde Palma y desde Madrid, donde destrozará a los regionalistas ante la cúpula nacional».

Y así seguirá el PP mientras la izquierda implanta la ecotasa. Campo libre como nunca para Francina Armengol y sus aliados. «Y Balears convertida en el paraíso de Podemos».