Según han informado desde la red de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) mediante un comunicado durante los meses de invierno se ha aprovechado el cierre del módulo para realizar obras de adecuación de la planta baja y se han renovado los aseos, la iluminación y la estética de la sala de espera de la planta inferior.
Así, han explicado que estas actuaciones enmarcadas en la primera fase del Plan de Calidad del Aeropuerto de Palma de Mallorca.
Además, se ha mejorado la zona de desembarque de vuelos que no estacionan en pasarela ampliando las zonas de paso y haciendo el recorrido de los pasajeros más directo hacia la salida, incrementando así la eficiencia de las operaciones en esta área. Asimismo, se han llevado a cabo reformas en todos los aseos de la planta.
Desde Aena han destacado que el cierre del Módulo A se realiza desde hace cuatro años durante los meses de invierno y permite al Aeropuerto ahorrar en recursos energéticos como la climatización y la iluminación.
Con su apertura, se vuelven a poner en funcionamiento sus 17 puertas de embarque y todas las pasarelas de esta zona.
El Módulo A es utilizado habitualmente para los movimientos de llegada y salida de países No Schengen y terceros países, aquellos orígenes o destinos cuyos pasajeros necesitan control de pasaporte.
Durante su cierre, toda la operativa de tráfico internacional se ha llevado a cabo en el Módulo D, realizándose en el mismo los correspondientes controles fronterizos.
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