El conseller Joaquín García visitó la feria de emprendedores que se realizó este año por primera vez en la UIB.

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Montar una empresa propia es una salida laboral que gana adeptos, a la vista de la situación de contención por la que pasan la mayoría de empresas privadas y la política de austeridad de la administración pública. La Oficina del Emprendedor y la Empresa (OEE) del Govern ha recibido en el primer trimestre del 2014 el triple de proyectos de emprendedores que el mismo período del año pasado, al pasar de 30 entre enero y marzo de 2013 a los ochenta de este año.

Se trata de solicitudes de información principalmente de ciudadanos de la Part Forana y Menorca, Eivissa y Formentera ya que en Palma el Ajuntament ofrece los servicios de Palma Activa. La oficina del Govern es una las prestaciones del Insitut d'Innovació Empresarial (IDI) que, tras su reestructuración, contribuir al autoempleo es una de sus principales misiones.

Los trabajadores de esta empresa pública, que depende de la Conselleria d'Economia i Competitivitat, se encargan de realizar un seguimiento y un proceso de acompañamiento a los emprendedores que se decantan por la autoocupación. De todos modos, no todos los proyectos que llegan al Govern se encuentran en el mismo estado de desarrollo, y los profesionales de la Oficina del Emprendedor distinguen en función de un primer diagnóstico que realizan a todas las iniciativas que reciben.

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Plan de negocio

En cualquier caso, todos los proyectos que quieran prosperar deben contar con un plan de negocio, requisito indispensable para pedir financiación.

Precisamente la Conselleria cuenta con un programa de ayuda en la búsqueda de financiación (SEERF) que en los primeros seis meses de funcionamiento ya ha ayudado a 48 emprendedores, cuya previsión de inversión es de 2,5 millones de euros. Las iniciativas empresariales que buscan asesoramiento son de diferente índole, aunque destacan las relacionadas con el turismo activo y la artesanía. Además, los proyectos suelen estar impulsados por dos o tres socios que se complementan.

Desde el IDI tienen claro que su objetivo es orientar a los emprendedores, a quienes animan a buscar proyectos innovadores, aunque también deben evitar «que se tiren a una piscina sin agua».