El portaaviones USS Harry S. Truman, en Palma. | Joan Torres

TW
52

La bahía de Palma acogió ayer la llegada del portaaviones nuclear estadounidense USS Harry S. Truman (CVN-75) y del crucero San Jacinto, que estarán fondeados en aguas de la bahía hasta el próximo día 7.
La presencia de los más de 6.000 hombres y mujeres que constituyen su dotación, una vez bajen a tierra, generará un impacto económico en toda la oferta comercial, de restauración, taxis y oferta complementaria de Palma.
Las patronales Pimeco y Acotur, en este sentido, aplaudieron ayer el retorno de la VI Flota a aguas de la bahía de Palma por el gasto que ello supondrá en todos los servicios de Palma. En este sentido, Pimeco señaló ayer en un comunicado que «hay que hacer todo lo necesario para volver a situar a la capital balear como una escala habitual y estacada de los buques de la VI Flota».

Impacto

Desde la Autoritat Portuària de Balears (APB) puntualizaron al respecto que el gasto de los marinos norteamericanos durante su estancia en la Isla se calcula en 120 euros por día, beneficiando a las empresas de rent a car, excursiones, restaurantes, hoteles, taxis y comercios.
Para el traslado de los marines y resto de soldados americanos por tierra se ha contratado una flota de unos 45 autocares, la mayor parte de Trasunión, que aparcan en la plataforma del dique del Oeste, donde se ha instalado una carpa a modo de village de recepción de los soldados, para subir a las golondrinas que los llevarán y traerán del portaaviones.

Este recinto funciona como base entre el buque y la ciudad. La instalación también será utilizada durante estos días por los tripulantes del crucero de escolta San Jacinto, que se encuentra fondeado en la zona. Durante estos días de estancia se han programado excursiones y visitas al casco antigua de Palma, Valldemossa, Sóller, la Coves del Drac, varias bodegas... Asimismo, las agencias de viajes contratadas han recibido reservas para realizar actividades de mountain bike, submarinismo, pesca y, especialmente, golf. Problemas técnicos con una plataforma y el mal estado de la mar, propiciaron que las golondrinas no pudieran ayer realizar el desembarco de marinos del portaaviones, circunstancia que se producirá a lo largo de toda la mañana de hoy.

Este hecho motivó que los hoteles contratados por oficiales y tropa recibieran ayer llamadas anulando reservas para la noche de ayer. «En Palmanova, se han cancelado reservas en los hoteles que los iban alojar», indicó ayer el presidente de la Asociación Hotelera de Palmanova-Magaluf, Sebastián Darder.
El presidente de la Asociación Hotelera de Palma y Cala Major, Javier Vich, añadió que la reservas «supondrán un incremento de la ocupación en algunos hoteles de entre un 20 y 25 %. Esto es la prueba palpable del impacto positivo de la llegada de buques de la VI Flota a Palma».

Labores sociales


Durante su estancia en la Isla, como ha sucedido en otras ocasiones, grupos de marineros estadounidenses participarán en sendas actividades humanitarias el sábado. Uno de ellos realizará labores de pintura y jardinería en el centro de Can Palerm, vinculado a Projecte Home. El otro grupo llevará a cabo labores de limpieza en el parque de la nueva sede de la organización en el polígono de Son Morro. Esta actuación está enmarcada en la política de ayuda que la USNAVY realiza en cada una de sus escalas en los puertos con el fin de potenciar su imagen.