Descarrilamiento. A las 6.43 horas del 19 de mayo de 2010, el tren de Manacor chocó contra un muro de hormigón junto a la estación de Sineu. El maquinista resultó herido crítico, 11 personas fueron hospitalizadas y más de 20 pasajeros, atendidos. | Teresa Ayuga

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La titular del Juzgado de Primera Instancia 4 de Inca, Elsa García, concluye en un auto que tras las diligencias practicadas por el descarrilamiento en 2010 del tren que une Palma, Inca y Manacor, a la altura de Sineu, aprecia la posible comisión de dos delitos de lesiones cometidos por imprudencia grave y 33 faltas lesiones.

El accidente se produjo por la caída de un muro en ese tramo y saldó con treinta personas heridas, algunas de gravedad, entre ellas, el maquinista del tren Amador Ferriol.

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Por ello, pide al ministerio fiscal y a las acusaciones que redacten sus respectivos escritos de acusación, previo a la apertura de juicio, contra ocho exaltos cargos del Servei Ferroviari de Mallorca (SFM), ingenieros y responsables del proyecto de construir un muro en el lugar del accidente.

Los imputados son los ingenieros de caminos Ramón Vilardell y Rafael Moral; los responsables del proyecto relativo a las obras de emergencias del tramo Sineu-Manacor, Raquel Pérez y José Asensi; el jefe de la obra Pedro Martín; y los representrantes del SFM, jefes de infraestructuras y de explotación, Pedro Sintes y Eduardo Barceló. La jueza apoya sus conclusiones en diversos informes periciales que solicitó para averiguar las causas del descarrilamiento del tren. Entre las deficiencias detectadas por los peritos destacan la falta de ejecución de las obras de emergencia, el incumplimiento de las labores de mantenimiento y limpieza del trasdós del muro.

También, destaca las deficiencias e incumplimiento de la normativa vigente del proyecto relativo a las obras de emergencia en la línea ferroviaria, y la inobservancia de la recomendación de realizar actuaciones para la estabilidad superficial de los taludes.