La Infanta, en una imagen de archivo. | Efe

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El sindicato Manos Limpias, personado como acusación popular en el caso Nóos, ha pedido hoy al juez José Castro que impute a la infanta Cristina por presunto delito fiscal y de blanqueo de dinero.

En un escrito registrado esta mañana en el juzgado de instrucción número 3 de Palma, Manos Limpias pide al juez que llame a declarar como imputada a la infanta Cristina para preguntarle si conocía el presunto origen ilícito de los fondos de la empresa Aizoon, de la que era cotitular junto a su marido, Iñaki Urdangarin.

El pasado lunes el juez Castro dio un plazo de cinco días a las partes personadas en la causa para que se pronunciaran sobre la posible imputación de la hija menor del Rey.

Irregularidades en Aizoon

La acusación popular destaca que la empresa de la infanta y Urdangarin registró gastos no deducibles, se aplicó incentivos fiscales a los que no tenía derecho, obvió el registro de activos financieros y no contabilizó gastos necesarios para obtener ingresos.

«Todo ello con la activa participación voluntaria de los socios que autorizaban y ordenaban» estas prácticas como copropietarios de la sociedad, subraya Manos Limpias.

La entidad concluye que la «operativa» de presunta defraudación descrita «ha sido realizada de forma consciente y con pleno conocimiento por parte de ambos socios, e incluso incluyendo su participación activa», ya que dadas las «magnitudes económicas» que manejaba Aizoon, «es difícilmente aceptable que una persona propietaria del 50 %» ignore su origen ilícito, máxime cuando da su visto bueno a las cuentas anuales.

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«Como muestra adicional de ese conocimiento resulta la cesión por alquiler de una planta de la vivienda habitual del matrimonio destinándola a oficinas» de la empresa mediante un contrato en el que ambos firman como arrendadores y como arrendatarios», insiste.

Manos Limpias destaca la «cuidada» formación de la Infanta

Manos Limpias, que al inicio de su escrito pone de relieve que la cuidada formación de la duquesa de Palma garantiza que es consciente de «las responsabilidades que de su firma y de conocimiento de sus actos pudieran derivarse, subraya que los hechos revelados por la investigación requieren que declare como imputada.

«Ante la más que suficiente evidencia expuesta, la automática asunción por su defensa y por la propia Fiscalía de la ajeneidad de doña Cristina de Borbón y Grecia dando por cierta la ignorancia que choca con la evidencia indiciaria», es preciso que declare.

Lo contrario «sería no solo antijurídico sino insólito en la praxis penal española», insiste la acusación popular.

El escrito de Manos Limpias también incluye con el análisis de diferentes hipótesis de presunta responsabilidad de la infanta por delitos fiscales en 2007 y 2008 y por blanqueo de capitales por el uso de fondos supuestamente generados irregularmente.

El sindicato, que aporta además al juez un informe pericial que refuerza sus tesis, asegura que si finalmente no se imputara a la infanta «la vergüenza que ya muchos ciudadanos están empezando a sentir en las calles sería desmesurada».