Antoni Gómez, en el Parlament.

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El vicepresidente del Govern, Antonio Gómez, ha vuelto a responsabilizar hoy al que fuera director en funciones de IB3 Jacobo Palazón de la contratación y la destitución como gerente de la radiotelevisión pública de Borja Rupérez, en la actualidad en prisión por su presunta implicación en un robo.

«Tenía las manos libres para incorporar a las personas que él considerara adecuadas, se lo he repetido hasta la saciedad», ha respondido Gómez al diputado socialista Cosme Bonet, que le ha preguntado en el pleno del Parlament si la decisión de incorporar a Rupérez estuvo ligada a los negocios entre éste y el presidente del Govern, José Ramón Bauzá.

El vicepresidente ha recordado que cuando él ocupó la dirección general de IB3 delegó todas sus funciones en Palazón, quien fichó a Rupérez como gerente y, apenas mes y medio después, le destituyó por «pérdida de confianza».

«Hace más de dos años que el señor Rupérez abandonó el ente público», ha incidido Gómez, para quien la oposición debería dejar de reiterar preguntas ya respondidas y reconocer que gracias a una «gestión brillante» se ha logrado duplicar la audiencia de la televisión autonómica.

Bonet se ha quejado de que el Govern no aclara qué motivó la contratación como gerente de IB3 de una persona completamente ajena al sector audiovisual de Baleares y cuya única vinculación con el archipiélago era su condición de «socio» del presidente del Govern en negocios particulares.

«Nada de esto es creíble», ha insistido el diputado socialista, para quien la ciudadanía tiene derecho a saber «cuál fue la relación del Govern con este presunto delincuente», en prisión preventiva por su presunta participación en el asalto al chalé de la abuela de su esposa.