A lo largo del debate se pusieron de manifiesto las diferencias ideológicas entre las tres formaciones, aunque coincidieron en las críticas al Gobierno por su trato a Balears. También aplaudieron el auge de la movilización social en contra del TIL.
Melià, vicepresidente del PI, reconoció que «existe un proceso de recentralización hacia Madrid», al tiempo que aseguró: «tenemos un Estado en contra de Balears». Sin embargo, y en alusión al proceso soberanista catalán, advirtió de «la separación de las realidades de ambos territorios».
Por su parte, el secretario general del PSM y portavoz de Més al Parlament, Biel Barceló, también criticó la actitud del Gobierno. Lo acusó de utilizar la crisis como excusa contra las autonomías y recordó que «el 80 % del endeudamiento corresponde al Estado». En este sentido, Barceló defendió la viabilidad económica de un estado balear. Finalmente, el líder de Esquerra en Mallorca, Joan Lladó, recordó la iniciativa de su formación de dirigir los impuestos generados en los pueblos en los mismos ayuntamientos en lugar de pagarlos directamente al Gobierno, siguiendo los pasos de algunas localidades catalanas.
Previamente, los líderes en Balears de los partidos estatales, Manel Carmona (EU); David Abril (IV) y Cosme Bonet (PSIB), también debatieron sobre el modelo de Estado que requiere Balears.
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L'únic estat vàlid és un Estat propi per a les Illes Balears