Tierno, Layatu y Aisatu, de Guinea, con sus mochilas.

Tierno, Layatu y Aisatu, de Guinea, con sus mochilas.

M. AzagraPalma11/10/13 0:00
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Fato Mata es de Senegal. Lleva viviendo en Palma casi seis años, tiempo en el que ha podido hacer cursos de limpieza, de camarera y de informática. Tiene tres niñas y un niño, y no tiene trabajo. De hecho, «en su casa no trabaja nadie», afirma. A principios de mes acudió a un punto de Cruz Roja Baleares para recoger el material escolar que solicitó días atrás. Fato, como otras 450 familias de Palma, participan del resultado de la campaña ‘Vuelta al cole’ de Carrefour, realizada a principios de septiembre, que ha permitido recoger material escolar por valor de 7.500 euros.

«Se destina a niños y niñas en situación de exclusión social. Este año obtendrán este material alrededor de 600 niños, casi un 30 por ciento más que el año pasado, cuando se contabilizaron cerca de 450 entregas. Este año ha habido mucha demanda y una buenísima respuesta por parte de la gente», afirma Xisca Quetglas, responsable de este programa.

Beneficiarios

Acceder a esta ayuda requiere unas pautas que deben cumplirse. «Tienen que pertenecer a algún proyecto de Cruz Roja (empleo, Unidad de Madres de la prisión, Atención Primaria...). También pueden acceder personas que acudieron directamente a solicitar la prestación y a través de los Servicios Sociales del Ajuntament de Palma, con el que colaboramos», añade.

Clientes de los centros comerciales compraron lápices, cuadernos, bolígrafos, sacapuntas, gomas de borrar, pinturetas, reglas y mochilas. «Al principio contábamos con pocas mochilas. Carrefour entregó a Cruz Roja 2.100 euros, con los que pudimos comprar más mochilas y permitir que los niños tuvieran más o menos el mismo material».

Voluntarios

Más de 60 voluntarios han y están participando en la ejecución total del programa, que abarca la recogida del material, hacer los paquetes y la entrega, que finaliza el próximo día 24. Carmen Jiménez es una de ellas. Desde una oficina de Cruz Roja llama a cada uno de los beneficiarios para indicarles dónde y cuándo pueden recoger el material. Es el punto de partida de una cadena solidaria que ha permitido una vuelta al cole más normalizada para varios cientos de niños y niñas de Palma.