Gasolinera de suministro de gasoil ubicada en las instalaciones de Puerto Portals.

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Los puertos deportivos, marina y clubes náuticos de Balears han vivido una temporada de verano un tanto atípica, porque mientras los amarres se han contratado casi al cien por cien de julio a finales de agosto, la actividad de la náutica recreativa se ha visto afectada por el efecto de la crisis, al disminuir entre un 15 y 20 por ciento el consumo de combustible.

Desde las asociaciones de Instalaciones Náuticas Deportivas de Balears (ANADE) y de Clubes Náuticos de Balears puntualizan que se ha notado un menos gasto de consumo, «porque la gente se ha decantado por controlar los gastos y salir, en consecuencia, menos a navegar. Ha sido un hecho generalizado de mayo a agosto».

Actividad

El presidente de los Clubes Náuticos de Balears, Miguel Suñer, señalaba ayer: «hemos notado un decrecimiento de la actividad, porque ni siquiera se ha salido a pescar como en años anteriores. Se nota que la gente controla más los gastos y ello, en consecuencia, incide en el número de salidas al mar, que han disminuido de forma ostensible respecto a 2012».

Desde el Club de Mar indican que el descenso del consumo de combustible se ha situado en torno al 20 %. «Han entrado muchos barcos, pero los de mayor calado se han ido a repostar fuera, en concreto a Gibraltar a los buque cisterna. Los depósitos de estos yates llegan a tener una capacidad para 100.000 litros y es normal que se opte por la vía más económica», puntualizaba ayer el gerente del Club de Mar, José Luis Arrom.

Desde Puerto Portals añadieron que «hemos notado un descenso del consumo de combustible en torno a un 15 %».

Arrom añadió que también se ha reducido este verano los días de estancia, «circunstancia que luego tiene un efecto añadido en todo lo relacionado con la oferta complementaria y establecimientos comerciales, ya que al estar menos días tiene incidencia en los niveles de consumo».

Desde ANADE vuelven a insistir en aquello de «menos máquina» para evitar que el gasto de combustible se dispare. Así, si antes se navegaba a 20 ó 22 nudos, este verano la velocidad ha sido menor, lo cual provoca que llegue a bajar hasta un 50 por ciento el consumo del combustible.