Alicia MateosPalma15/06/13 0:00
TW
0

El Ajuntament de Palma concedió en 2012 un 30,5 % más de licencias de obra menor que en 2007, cuando se produjo la punta del 'boom' inmobiliario. En concreto, la Gerència d'Urbanisme dio el año pasado 3.325 licencias de obra menor y menor simple (reformas que no afectan a la estructura del edificio) mientras que en 2007 fueron 2.548. Por el contrario, las licencias de obra nueva o reformas que afectan a la estructura del inmueble descendieron un 50,2 % respecto al año 2007.

El teniente de alcalde d'Urbanisme, Jesús Valls, explica que la crisis económica ha motivado que los ciudadanos hayan optado por hacer reformas menores en lugar de obras nuevas o de mayor envergadura. Además, destaca que el impulso que se ha dado a la Inspección Técnica de Edificios (ITE) desde Urbanisme ha motivado que se produzcan un mayor número de reformas. En este sentido, Valls destaca que el 80 % de los inmuebles obligados a someterse a la ITE lo han hecho. «Hemos duplicado el grado de cumplimiento respecto a la pasada legislatura», subraya.

Obra nueva

Respecto a la obra nueva, el titular d'Urbanisme considera que en Palma ya se ha tocado fondo a la caída en picado que se inició en 2008 (ver gráfico). Pone como ejemplo que en los últimos años se ha producido una estabilización en la concesión de licencias de obra mayor; se ha pasado de las 1.161 de 2007 a las 503 de 2010, 508 de 2011 y 579 de 2012. Valls adelanta que en 2013 la concesión de licencias de obra mayor se mantendrá estable, ya que en lo que va de año se han otorgado 227 licencias de obra mayor y recuerda que para el último trimestre del año hay previstas numerosas obras en la Platja de Palma.

No obstante, espera que se produzca un repunte en la recaudación ya que los proyectos son de mucha envergadura. Por citar un ejemplo, el Ajuntament recaudará 3 millones de euros por la construcción del Carrefour Property en el Coll d'en Rebassa; además se construirán varios hoteles en Platja de Palma y otros harán reformas importantes.

Valls está convencido de que cuando comience a fluir el crédito aumentará la construcción de viviendas nuevas, aunque no se llegará a los niveles de 2007.