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La vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, ha reclama a todas las instituciones, incluido el Parlamento, el Gobierno y la Casa Real, que actúen con responsabilidad ante la imputación de la infanta Cristina y no «tomen partido» entre el juez y el fiscal.

Tras reunirse con asociaciones de mujeres para estudiar medidas que refuercen la protección a los menores en los casos de violencia de género, Valenciano ha pedido respeto a todas las instituciones sobre este caso y que no se entre en el fondo del asunto y ha garantizado que el PSOE será «especialmente responsable».

«He pedido a todas las instituciones, al Parlamento, el Gobierno y desde luego a la Casa Real, a todos ellos les pido que se deje actuar a la Justicia y que no se tome partido por una discrepancia legítima, que entra dentro de la normalidad, entre el juez y el fiscal», ha dicho.

Para Valenciano «es una mala noticia» que la infanta Cristina haya sido imputada en el caso Nóos, porque contribuye a deteriorar gravemente la imagen de la Monarquía, aunque es «bueno» que se sepa, incluso en el exterior, que en España nadie se «escapa» a la ley.

«No es oportuno entrar en el fondo de las decisiones judiciales», ha señalado tras insistir en que es evidente el deterioro que causa a la Monarquía al tratarse de un caso «muy grave» que afecta a la familia del Rey y que con esa gravedad hay que abordarlo.

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En este sentido, ha asegurado que el PSOE no se quedará de brazos cruzados ante ese deterioro y seguirá insistiendo y reclamando al Gobierno y al PP que se apliquen a la Corona los criterios de la Ley de Transparencia, que en estos momentos se tramita en el Congreso.

Valenciano ha defendido que eso también será bueno para la propia Casa Real, ya que la transparencia es «más que positiva» para todas las instituciones en un país democrático.

La dirigente socialista no ha querido pronunciarse sobre las peticiones formuladas desde algunos sectores para que la infanta Cristina renuncie a sus derechos dinásticos y ha explicado que el PSOE esperará a ver cómo evoluciona el caso y, en función de lo que suceda, podría cambiar de postura si también cambian las circunstancias.

Por el momento, ha recordado que la infanta está imputada, y eso no es ni un procesamiento «ni mucho menos una condena», por lo que ha apelado a dejar trabajar a la Justicia y que el procedimiento siga su curso.

Lo que si ha recalcado es que la imputación demuestra que las instituciones democráticas en un Estado de Derecho funcionan y todos los españoles están sometidos a la ley, «también la infanta».