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El vicepresidente de Emaya, Bernat Roig, presentó ayer su dimisión irrevocable para evitar ser acusado de dar un trato de favor a su hijo, que a su vez ha sido acusado de acoso laboral por parte de la exdirectora del Centre Natura, Isabel Caldú; así como para no perjudicar a Emaya y a Cort. Roig niega rotundamente las denuncias de Caldú y en el consejo de administración de Emaya de ayer presentó documentación del comité de empresa, correos y actas notariales que, según él, desmienten la versión dada por la exdirectora del Centre Natura, que fue despedida el 22 de septiembre de 2011. Además, subrayó que él no tenía ningún cargo en Emaya en la pasada legislatura, ni el PP gobernaba en Cort. Roig ha puesto en manos de su abogado este asunto para iniciar acciones legales.

Expedientes

El ex vicepresidente de Emaya sí reconoció en el consejo de administración que su hijo había sido conflictivo. Así, la pasada legislatura se le abrieron varios expedientes disciplinarios de suspensión de empleo y sueldo por insultos xenófobos, gritos y amenazas a compañeros. Sin embargo, el presidente Emaya, Andreu Garau, aseguró que esta legislatura no se le ha abierto ningún expediente y destacó que en el caso de que ocurriese sería tratado igual que el resto de trabajadores. Garau argumentó que en la empresa pública hay más trabajadores conflictivos y uno de ellos está en la cárcel.

El consejo de administración celebrado ayer fue muy tenso y la regidora de Més Marisol Fernández, lo abandonó antes de que terminase porque Garau llamó a la oposición «miserables y carroñeros» y los acusó de querer aprovecharse políticamente de este asunto. Fernández quería datos concretos de lo sucedido y no las explicaciones del padre del acusado.

El presidente de Emaya exigió a la oposición que hiciesen un comunicado negando las acusaciones vertidas contra el hijo de Roig. En este sentido, Garau aseguró que el socialista Andreu Alcover negó en dos ocasiones que haber pedido la dimisión de Bernat Roig y destacó que está grabado. Sin embargo, el PSOE envió ayer un comunicado de prensa diciendo que «la dimisión se produce días después de que el PP rechazara en el pleno de Cort el cese del señor Roig, a instancia del PSIB-PSOE». Además, añadían que «el consejo de administración ha acordado abrir una investigación, como solicitaban los representantes socialistas, para esclarecer la denuncia por acoso contra el vicepresidente de la empresa y su hijo». Según Garau, la investigación se inicia a instancias del propio Bernat Roig para esclarecer lo sucedido. El PSOE criticó la actuación del presidente de Emaya, ya que «en el pleno aseguró reiteradamente que no pasaba nada en la empresa y acusó de mentirosos a los medios de comunicación y de irresponsable a la oposición».