Fotografía de archivo de Pau Català. | Jaume Morey

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El mundo empresarial mallorquín y numerosas personas que lo trataron durante su larga trayectoria como emprendedor mostraron ayer su dolor por el fallecimiento el pasado viernes, a los 79 años de edad, de Pau Catalá Riera, reconocido impulsor de la economía insular durante décadas con sus variadas iniciativas de creación de empresas y notablemente en los once años durante los que presidió con total dedicación la Cámara de Comercio de Mallorca (1987-1998). En 1989 fue nombrado miembro del comité ejecutivo del Consejo Superior de Cámaras de Comercio, Industria y Navegación de España.

La Cámara de Comercio señaló ayer en un comunicado oficial que «el nombre de Pau Catalá se escribe con mayúsculas en la historia del asociacionismo empresarial mallorquín, en el que sobresalió como presidente de la Asociación de Promotores-Constructores y tesorero de la Cámara, para acceder posteriormente a la presidencia de esta institución, desde la que jugó un papel relevante en unos años clave para la organización cameral y la internacionalización de la economía insular».

Emprendedor

Desde la presidencia cameral, Catalá intensificó la proyección hacia el exterior de sectores de la industria local como el calzado y la bisutería, fundamentales en el desarrollo económico insular, mediante la organización de misiones comerciales dirigidas a mercados emergentes que posteriormente habrían de ser referencia habitual entre el em- presariado de Mallorca.

Pau Catalá fue contratista de obras y promotor de edificaciones. Entre sus trabajos más recordados está la construcción de los primeros aparcamientos subterráneos que ha habido en Palma, en la plaza del Comtat del Rosselló y en la Plaça Major.

Catalá fue también presidente del Gremio de Maestros de Albañilería y fundador y presidente de la Asociación Patronal de Albañilería, Edificación y Obras Públicas. También ostentó el cargo de presidente de la Federación de Balears de la Construcción.

Velatorio

El velatorio de Pau Catalá tendrá lugar entre las 8 y las 14 horas de hoy en el tanatorio de Son Valentí, mientras que el funeral se celebrará mañana lunes, a las 20 horas, en la iglesia parroquial palmesana de San José Obrero.