El caos aéreo de 2010 dejó a miles de pasajeros atrapados en Palma. | Jaume Morey

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El abogado que representa al colectivo de controladores aéreos imputados por el delito de sedición en Palma tras el caos generado en el puente de la Constitución de 2010, Diego Salmerón, presentó ante el juez instructor de la causa, Juan Catany, nuevos documentos que probarían, según afirma en su escrito, que las cancelaciones de vuelos y el cierre del espacio aéreo español fueron provocados por una «información falsa» de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA).

Los días 3 y 4 de diciembre, miles de pasajeros quedaron atrapados en los aeropuertos debido al abandono masivo de sus puestos de trabajo por parte de los controladores aéreos.

«El juzgado debe conocer que la información que se difunció en los aeropuertos a las compañías aéreas tenía su base en la información librada en los documentos 1 y 2 que hemos aportado», señala el escrito del abogado Diego Salmerón.

En ese contexto, el letrado destaca cuatro aspectos que califica de muy importantes, y que son los siguientes:

Normalidad

«Hasta ese momento (día 3) había normalidad en el tráfico aéreo y no se habían producido cancelaciones; la información que se daba al respecto de diversos aeropuertos era falsa; no se había cerrado el espacio aéreo español y se hizo creer a todo el país que sí, hasta que finalmente sí se provocó su cierre; estas informaciones difundidas provocaron las anulaciones de los vuelos por parte de las compañías».

La documentación aportada reproduce la evolución horaria de las operaciones en los aeropuertos de Palma, Eivissa y Maó, subrayando que el primer día del conflicto, 3 de diciembre de 2010, «no se había producido ninguna cancelación de llegada ni de salida de aviones». Más tarde, según el letrado, AENA informó de que se había cerrado el espacio aéreo «debido al abandono masivo de sus puestos de trabajo por parte de los controladores», cuestión que rechaza el letrado y que precipitó la paralización de los aeropuertos.