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Los empleados del Consell de Mallorca -incluidos los bomberos y el personal del Institut Mallorquí d´Afers Socials (IMAS)- se concentraron ayer frente a la sala de formación de la Llar de la Infància para expresar su rechazo «a la forma en que nos quieren imponer la jornada laboral de 37,5 horas».

Los trabajadores, que están preparando un calendario de movilizaciones, ya protagonizaron ayer una protesta con pitos, gritos y queman de neumáticos y restos de madera en un contenedor -de forma controlada- como señal de protesta y después apagaron el fuego.

Los integrantes de la Junta de Personal, el comité de empresa y los sindicatos con representación en el Consell y en el IMAS -CCOO, UGT, CSIF y STEI-i- afirmaron que desde Funció Pública se quieren imponer las 37,5 horas a los diferentes colectivos de trabajadores públicos y que ellos no están de acuerdo.

Ayer se llevó a cabo una reunión con el Consell que concluyó sin acuerdo y hoy está previsto que la Junta de Personal y el comité de empresa del IMAS y Consell se reúnan para plantear un calendario de movilizaciones.